Llegando al (por ahora) nuestro hogar -priv Uehara-

Abrazo por la cintura a Uehara dejando que el muchacho se moviera a su gusto, asi podia excitarlo aun más. Se dejo lamer y escucho con placer, gimiendo levemente antes los placeres del menor. No sabia que era lo que mas le gustaba de todo eso, quizás era la propia mezcla de todo lo que hacia esta escena tan placentera.

Había olvidado lo caliente que se podía poner antes los movimientos de un chico, o no lo sabia muy bien por que quizás este había sido el mejor acto sexual que había tenido. Si no bien recordaba, lo había hecho por cariño una ves, pero no había sido lo mismo. Uehara, le entregaba mas placer que ninguno.

Siguió masturbándole con rapidez, subió una de sus manos hasta los cabellos del menor, acariciándolos y rozando sus orejitas suaves. Luego fue hasta su cola, masajeo su base y la acaricio después por completo, había olvidado atender esta parte, quería saber que provocaba en Yuuji que le tocara ahí.

No se había percatado de lo concentrado que estaba Uehara en aquella zona de su cuerpo pero al escuchar sus palabras de arrepentimiento comprendió, no hizo mas que seguir con lo que hacia, ya vería como le castigaba, si es que a lo que tenia pensado se le podría llamar castigo. Se sorprendió un poco al sentir los labios del chico con desenfreno desbordar los suyos, lo beso ganoso de ellos, mordiendo un poco su labio inferior y sonriéndole con malicia.

Lo soltó, tomándolo por la cintura y haciendo que se alzara, fácilmente y lo acostó en la cama, le volvió a sonreír con malicia, estaba un poco sudado, ya habían disfrutado mucho y eso aun no le parecía suficiente.
-Me marcaste? -le pregunto alzando una ceja acercándose hasta su entrepierna. Se toco donde supuso donde había dejado esa marca y lo fulmino con la mirada- Que hare contigo... -le dijo tomando el miembro del chico y apretando su punta. Luego introdujo el miembro por completo dentro de su boca succionándolo con fuerza, mientras veía a los ojos a Yuuji.

Siguió succionando con fuerza su miembro con rapidez y fuerza apretó levemente sus testículos y unos de sus dedos de la otra mano se coló en la cavidad del menos, metió otro dedo y los movió rápidamente, toando aquel punto que lo hacia estremecerse, lo seguía mirando con lujuria, chupo su pene con rapidez, le encantaba el sabor que tenia el miembro del chico, todo su cuerpo sabia bien.

-Gime… -le dijo apenas soltando su miembro y volviendo a succionarlo. Comenzó a masturbar su tronco mientras lamia y apretaba con fuerza, la unta de su pene contra su paladar. Posiblemente no faltaría mucho para que se viniera. Seguía moviendo sus dedos con insistencia en aquel punto del menor, presionándolo levemente. Se cuestiono un poco antes de hacer que Yuuji se viniera y lo soltó, rápidamente subió hasta sus labios y los beso, penetrándolo suavemente y moviéndose con rapidez, hizo que lo abrazara con sus piernas y dejo un cojín debajo de la caderas de Uehara para poder llegar hasta el fondo de él. No olvido su miembro, y volvió a masturbarlo rápidamente.

Entreabrió sus ojos también al sentir la mirada del menor y asistió levemente, sin dejar de moverse y sin dejar de mover su mano en el miembro del chico, de apoco fue sintiendo su mano húmeda y el liquido espeso de Uehara, sin soltarlo lo siguió moviendo por unos segundos, de esa manera se sentía mejo, no dejaría que ningún detalle se le escapase.
Se siguió moviendo con rapidez, tomando por la cintura al menor, tampoco no faltaría mucho para que se viniera dentro de el, se movía cada vez con mas rapidez y gemía aun mas continuamente y desesperado, lo beso con desespero y lo soltó para volver a gemir placenteramente.

Apretó un poco con sus manos los costado de Yuuji, sin dejar marca claro, solo por la fuerza que hacia, no podía detenerse y necesitaba venirse. Sin mas, después de unos cuantos gemidos ahogados se vino en su interior, y disminuyo el ritmo de sus embestidas. -Yuuji... -gimio recargandose en su cuerpo sin salir de él.

Siguio respirando rapidamente sobre el cuerpo de Uehara, aun no queria apartarse de el y apenas queria moverse, todo habia estado perfecto. Suspiro pesadamente y beso el cuello de Uehara, tenia que dejar indicio que aquello no solo era calentura o almenos tenia que demostrarle que no seria lo mismo después de todo eso.

Se separo de su cuerpo acostandose a su lado y tratando de controlar su respiracion, volvio a suspirar un par de veces y cuando ya se sintio lo suficientemente bien llevo sus manos hasta su cabellos y lo peino con sus dedos hacia atras.

-Oye... estas bien? -le dijo mirandolo de reojo, no podia demostrar mas que eso, tampoco se lanzaria a abrazarlo y a besarlo, despues de todo soo habia pasado un día con el y no le habia prometido amor eterno. No por ahora.
Apoyo sus codos en la cama y volvio a mirar a Uehara, con ciertas ganas de besarlo, pero se contuvo y se termino sentando en la cama, necesitaba una ducha y luego dormir unas cuantas horas.

Sonrió levemente y volvio a ver a Uehara, se acerco hasta donde estaba y se sento a su lado, tomando una de sus muñecas y levantandolo para que lo abrazara, acaricio su espalda y su cola. Si bien esto contradecía mucho su personalidad, no podia dejar de hacerlo, queria tener al perrito de esta manera y sentir el calor de su cuerpo lo mas cerca del suyo. Quizas no se lo admitiría, pero esto era lo que sentía en realidad.

-Vamos a bañarnos... -susurro en su oído, mientras se separaba lentamente de su cuerpo y se ponía de pie- vamos... -le dijo extendiéndole un mano para ayudarlo a pararse. Teru podría ser serio, frio en algunos momentos, pero bien se decia que los hombres que solian ser asi, aveces eran los mas preocupados y cariñosos en la intimidad. Espero a que tomara su mano y lo abrazo cargandolo y bajandolo de la cama, volviendo a tomar su mano y guiarlo hasta el baño.

-Estas muy cansado? -le pregunto cuando ya estaban en el baño, abrió la llave del agua caliente y luego la del agua fria.

Sonrio levemente al escuchar su respuesta, si, puede que hoy solo le doliran las piernas pero mañana estaria mal, de verdad desearia poder quedarse en casa al día siguiente, pero tenia cosas que hacer, y su trabajo no se hacia solo. Entro primero a la gran bañera y miro a Uehara para que se incorporara rapidamente.

Tomo el jabon y lo froto en sus manos unos segundos. Pensaba en que haria mañana, probablemente su cliente estaria de malas, era culpable, y tenia que lograr la menor pena posible para el, despues de todo era un hombre importante y millonario, seguramente si todo salia bien, hasta podria renovar su auto. Suspiro distraido y miro a Yuuji.

-Mañana te quedaras solo unas cuantas horas -le dijo mirandolo sin mucha expresion en su cara- tengo que trabajar... -tomo una pierna del chico y luego el jabon, pasandola por ella, luego por la otra. -Date vuelta -le dijo despues de jabonar un poco su pecho.

Noto los sentimientos de Uehara y deslizo sus manos por sus costillas y luego hasta su pecho, beso suavemente su hombro y luego su mejilla. Suspiro levemente y cerro sus ojos.

-Tratare de venir luego... -murmuro, comenzando a jabonar su cuello, bajo lentamente hasta la entrepierna de menor... despues de todo tambien tenia que limpiar en ese lugar, por lo que trato de hacerlo de forma delicada- Trabajo en la mañana... comere contigo... -le dijo cuando ya habia terminado, lo sonto y comenzo a limpiar cada parte de su propio cuerpo.

-Sera mejor que no le abras la puerta a nadie... a menos que sea mi asistente, ella tiene llaves pero suele olvidarlas... -le dijo sabandose el exceso de jabon de cuerpo y tomando el frasco de shampoo- ven- le dijo para poder echarle un poco de este y comenzar a frotar u cabello.

Siguio frotando sus cabellos hasta que suposo que estaba bien asi, sus cabellos eran suaves, le encantaba sentirlos entre sus dedos, le sonrio levemente cuando abrio un ojo y asistio, como diciendole que estaba listo para enjaguarse, pero no lo dejo apenas moverse cuando ya tenia en sus manos la ducha telefono, abrio un poco las llaves de agua fria y caliente y las templo, llevo el agua hasta la cabeza de Yuuji y comenzo a lavarle, con cuidado saco el jabon de sus orejitas y lo solto cuando ya estuvo listo.

Cuando al final ya estuvo listo el tambien se puso de pie y tomo una de las toallas, se la rodeo por las caderas y tomo la mano de Yuuji para ayudarlo a salir, cuando ya estuvo fuera le paso una toalla. Y saco el tapon de la bañera para que es agua se fuera.

Camino hasta uno de los muebles y saco el secador de pelo de uno de los muebles, lo enchufo y comenzo a secarse el cabello lentamente, miro de reojo a su mascota, no era que no lo tomara en cuenta, pero por la costumbre de vivir solo, aveces olvidaba que estaba por alli. Lo llamo con una mano y comenzo a secar su cabello tambien.

-Que es? -le pregunto tomando con delizadeza sus orejitas y secandolas mientras la acariciaba, tambien tomaba parte de mechones de pelo y los secaba en la puntas y luego en la raiz, de verdad que de apoco veia como el pero de Uehara se esponjaba un poco y le daba un aspecto mas gracioso, pero tierno a la vez, se quedo mirandolo por unos segundos y saco su toalla para secar su cola que estaba mojada. Tomo la colita del menor y comenzo a pasar el aire tibio por encima de ella.

Tuvo curiosidad por lo que le preguntaria su mascocta, pero sabia, de algun modo, que no pasaria de dudas como en que trabajaba, por que lo habia comprado o que tal le parecia su comportamiento. Se quelo mirandolo unos cuando segundos mientras seguia secando la punta de su cola y luego cuando ya estuvo seca dejo el secador sobre el mueble y lo desenchufo.

Lo miro de reojo y se toco en donde estaba el chupón, mirándose luego al espejo, era demasiado notorio, cerro sus ojos y suspiro, volviendo a mirar a Uehara.

-Acaso quieres que te castigue? -le pregunto de manera seria mientras tomaba la muñeca del menor y lo acercaba a su cuerpo, lo miro fijamente a los ojos y pudo notar el miedo y la sumisión de este, pobre, estaba acostumbrado a que lo trataran así y se sorprendía en demasía cuando no le daban mayor importancia a sus travesuras- Dime... -le dijo cerca de su rostro, sabiendo que de algún modo le provocaba miedo, también sabia que podía estremecerlo ante sus palabras. Tendré que hacer lo mismo?... -pregunto rozando sus labios y luego lo soltó, sonriendo levemente.

- Quizás no estés acostumbrado al tipo de tratos que te daré yo... -le dijo aun mirándolo a los ojos, tomo unas de sus caderas y volvió a acercarlo a su cuerpo- No tenia por que culparte por algo que no me molesta que hagas... después de todo no tengo a quien mas mostrar mi cuerpo -le dijo sinceramente pasando su otra mano por los cabellos del chico- así que no te preocupes, y no tengas miedo de mi... puede que una que otra ves me comporte mal contigo, pero no mas que eso -termino diciéndole y dándole un pequeño beso en los labios- ahora vamos es tarde y quiero dormir.

Bajo sus orejitas cuando su amo pregunto aquello, mordiendo su labio inferior con duda, no queria, eso era mas que obvio pero le habían enseñado que se merecía aquello después de hacer algo “indebido”. Cuando su amo le jalo, sintió el miedo instintivo y sus sumisión fue inmediata, hubiera sido mejor no decir nada, asi por lo menos se hubiera ahorrado el dolor que posiblemente se avecsinaria. Y al oírle solo paso saliva nervioso. Pero su sorpresa fue notoria al oírle.

Y de nuevo se vio apegado a su amo, sonrojado ahora y sin comprender. Ladeo su rostro en signo de “No entiendo” y le miro curioso, ya olvidándose del miedo que aun estaba presente pero ya era fácil de ignorar. Le escucho con atención y sonrió de forma complacida y algo avergonzada por pensar que su amo seria como todos los demás. Pero claro que no era igual! Era suyo su amo y era evidente que su vida con el seria radicalmente diferente.

Al oírle asintió. Se medio cohibió por su beso y le dedico una sonrisita meramente agradecida. Asintió a sus palabras y tomo su mano para salir del baño, con su cola y orejas todas esponjdas pero muy relajado, se preguntaba si a su amo le gustaría verle asi o no, de cualquier manera, ese frizz era molesto pero momentaeo ya se le bajaría.

Sonrio tomando la mano de Uehara con firmeza y yendo hasta el cuerto que quedaba pasando el umbral de la puerta, no sabia bien como dormia Uehara, pero él dormia así, desnudo, estaba acostumbrado y despues de lo que habia pasado hace unos minutos menos debia de importarle. Apago la luz del baño y miro por encima las tapas de la cama, hizo una pequeña mueca y saco el cubre cama, caminando hasta la cocina para dejarlo en un recipiente lleno de ropa sucio, volvio al cuarto y saco del closet otro cubre cama, lo puso en donde correspondia y lo aseguro para que por la noche no cayera.

Cuando ya todo estuvo listo abrio las tapas y miro a Uehara.
-Acuestate -le dijo haciendo un ademas y sentandose en el la cama sacandose la toalla de las caderas y acostandose despues, tapandose con las tapas.