Llegando al (por ahora) nuestro hogar -priv Uehara-

Paró fuera del hotel y se bajo del auto rapidamente para abrirle la puerta a su nueva mascota, a quien de buenas a primera tomo de la malo y la puso detras de él, para protejerlo. Le paso las llaves al encargado y se adentro con el chico al hotel, apenas estuvieron ahí lo abrazo por los hombros, pareciendo ser una pareja ya establecida. Despues de todo, al ver como estaban las cosas, tenia que tener cuidado con lo que le pertenecia. No queria verse en un caso como el de quien se viola a una mascota de otra persona, y el violador se justifica diciendo que su amo apenas lo miraba.
Siguio caminando mirando de reojo y de mala manera a quien se les atravesaba por el camino, al fin llegando al asensor, entrando en el y no dejando que nadie mas subiera. Se apoyo en la pared del asensor y miro a Uehara, quizas si se quedaba asi podria cohibirlo, era un juego cruel, pero queria verlo de esa manera, despues de otro no era tan desagradable si todo terminaba bien.
-Es agradable estar fuera de la tienda no? -le dijo suspirando y poniendo su manos en los bolsillos, seguia mirandolo fijamente.

Alzo sus cejas al escuchar lo ultimo, bueno y en realidad se veia que era verdad, no estaba desnutrido o golpeado como lo imagino, se mantenia intacto para su amo, quien lo mantendría igual o quizas mejor. Sonrio ladino y sin mas se lo acerco tomandolo de la muñeca suavemente. Cuando lo tuvo cerca tomo su mentón y lo subio para contemplar su rostro por varios segundos. Cuando ya se había disidido a besarle se abren las puertas del elevador. Sonrio de lado y miro hacia la salida.
Apenas entraron a la habitacion, que era inmensa, dejo las llaves en una mesita al lado de la entrada y camino hasta la sala de estar.

-Me ire a dar una ducha -le dijo de manera indiferente, sacandose la chaqueta y reteniendola en sus manos- en la cocina hay cosas para comer y si no hay nada que te guste puedes llamar a la recepción -comento finalmente yendo hasta la habitación y sin cerrar la puerta comenzó a desvestirse.

Ya había desechado camisa, zapatos, calcetines y pantalones. Camino hacia el closet, seguramente no quedando a la vista del perro y volvió, sentándose en la cama y sacando sus interiores para luego sujetar su toalla en la cintura-
-No creas que no te descubrí -le dijo desde la habitación y con una sonrisa se fue hasta el baño que quedaba dentro de ella. Abrió la llave de agua caliente y se metió. Saliendo a los pocos minutos, aun con el pelo mojado y con la toalla en la cintura, volvió hasta el living y miro seriamente a Uehara.
-No me gusta que espíen en mis cosas... ahora fue intencional, así que te perdono -le dijo de manera divertida, sonando para el chico, sarcástico.-Comiste algo? -le pregunto después yendo hasta la cocina y abriendo el refrigerador.
Le divertía la forma de ser del chico, seguramente así serian las cosas con él todos los días, era tranquilo y algo travieso, totalmente diferente de lo que antes solía estar rodeado. Uehara sin duda seria alguien importante y, claro, lo mas importante es que ya en ambos había una atracción física importante, ya se dedicaría a mimarlo y a besarle como correspondía.

-Te dije que te perdonaba -le dijo apenas escucho ese "lo siento", se lo había dicho de manera fría, no lo controlo y es que era así con todos y no estaba acostumbrado a tratar bien a las demás personas, esperaba acostumbrarse a su mascota para poder así darle lo que mas necesitaba éste.

-Mhh -dijo sacando un poco de jugo del refrigerador y echándole a un vaso, comenzó a beber lentamente y vio como Uehara lo miraba, se sonrió un poco, ya sabia lo que provocaba en el chico y eso le gusto aún más.- Espérame en el dormitorio -le dijo de manera seductora mientras guardaba el frasco de jugo, eso era solo para molestarlo, ya que no tenia muchas ganas de hacerlo, solo quería estar un rato reposando después de un día agotador, que ya estaba terminando.
Antes de partir al dormitorio fue hasta el teléfono y pidió un poco de comida para cenar, no tenia ni la menor intención de cocinar algo.

Apenas corto el teléfono fue hasta el dormitorio y se acostó en la cama, así como estaba, algo húmedo con el cabello mojado y apenas cubriéndose con una toalla. Y no, no era un desvergonzado, después de todo era su habitación y estaba solo con su mascota. Si el otro daba el primer paso, que seria abrazarlo, todo marcharía mas fácil para él, no le gustaba partir con las atenciones.

Sonrio al escuchar su pregunta y se lo acerco un poco mas, pasando su brazo por debajo de la cabeza del perrito.
-Pense que no lo preguntarias nunca -le confeso suspirando y mirandolo de reojo. A decir verdad, al verlo de esa forma tambien se le vinieron varias ideas a su mente, pero ya habia tiempo para eso, por ahora queria presentarse, no sabia nada de su mascota y su mascota nada de él.
-Mikami Teru -le dijo despues de un rato- puedes llamarme como quieras, a menos que te lo prohiba -agregó, siempre despues de una frase amable la remataba con algo como eso, pero despues de todo parecia hasta divertido.- Prefiero no preguntarte nada sobre tu pasado, no se por que los pasados de todas las mascotas son tristes y no quiero que llores -le dijo después, como si le hartara ese tipo de comportamiento, pero no era tanto eso, sino que no le gustaria que al primer día de conocerlo se pusiera a llorar.
Despues de estar un rato así con el, se puso de lado y lo miro de frente, apoyando la mano que tenia libre en la mejilla del menor. Se quedo mirandolo un rato, le agradaba su rostro y sus actitudes, queria tenerlo de una ves por todas.
-Quieres besarme? -le pregunto de manera atrevida esperando la respuesta o accion de su mascota.- Si no lo haces lo hare yo -le dijo después mirando sus ojos y sus labios.

Se quedo un rato mas viendo los labios del menor, al parecer los dos necesitaban los labios del otro, por lo que termino con la agonía de ambos y se acerco a el, estrechando su labios contra los de Yuuji, se separo apenas de el para ver su rostro y volvio a besarlos, para ahora invadir su boca con su lengua. Se sentia delicioso el roce de ambas, comenzo impacientemente a acariciar con su lengua la del chico, recorrio cada parte de su boca y luego se separo para tomar un poco de aire. Sin decir nada mas volvio a besarlo, le habia encantado y queria cada ves mas de ellos, jugueteó con su lengua entrelazandola y succionandola un poco después. Quizas ya se habia excitado, pero por el momento queria seguir con los besos, posicionando agilmente al chico sobre su cuerpo.

-Quieres hacerlo? -le dijo como si tuviese necesidad de hacer, y sin escuchar respuesta volvio a besarlo, acariciando su espalda y bajando ligeramente hacia sus gluteos.

Aquel cuerpo del chico le habia encantado y no podia evitar sentir ganas de tenerlo, por muy cansado que estuviera, estaba sacando ganas de la nada y queria hacerlo con el. Solo esperara que el otro igual, por que si no, seria aburrido.

Sonrio cuando comenzo a mover sus caderas, sin mas introdujo una de sus manos por el pantalon del perrito y la deslizo hasta la parte de adelante, ayudandose con la otra, pra desabrocharle el pantalon y bajar su cremayera.

Estaba ya agitado, su respiracion era discontinua y besaba al chico casi con desesperacion, elevando un poco su cuerpo para tenerlo aun mas cerca. Tenia conciencia que aquello no era mas que calentura, pero sin duda era el mejor de los caminos que estaban recorriendo, sabia que no faltaria mucho para que de verdad se encariñara con el.
Volvio a moverse, quedando ahora sobre el, sin darse cuenta, la toalla habia caido y no hizo mas que tirarla hacia un lado mientras comenzaba a bajar los pantalones del menor. Por su mente pasaron sucios pensamientos, lo unico que deseo es que el chico no haya tenido sexo hace mucho, de seguro estaria muy estrecho para el. Se mordio el labio inferior y le saco la playera, se quedo mirandolo un rato, un par de gotas de su cabello mojado, cayeron en el rostro de Uehara, le sonrio y las quito con su mano, acercandose a el y volviendo a besarlo, mientras comenzaba a mover sus caderas contra las del chico.

-Mh~ -solto aquel gemido en los labios de Uehara, moidiendolos ansiosamente, queria disfrutar de cada parte del cuerpo del chico, que poco a poco lo iba descontrolanzo mas, volviendolo por completo loco. Se separo de el rapidamente para sacar sus interiores. Paso una mano por encima de su miembro y comenzo a masturbarlo mientras veia cada una de sus reacciones, las cuales le excitaron aun mas, se podia notar a la vista en su propio cuerpo. Tomo un pie del chico y lo llevo hasta su rostro para besar y lamer sus dedos.

Despues de tenerlo de ese modo por unos segundos, bajo su pie, dejando sus piernas abiertas y algo fleccionadas. Volvio a inclinarse sobre su cuerpo, dejando sus codos a ambos lados de la cabeza de Uehara, volvio a besarlo, con fiereza. Lamio sus mejillas y se elevo un poco para llegar hasta sus orejas y morderlas levemente, mientras se movia con insistencia sobre su entrepierna, que por aquella posicion y las piernas separadas del chico, hacia que la punta de su miembro presionara cada ves mas su entrada.

-Necesitas que te acostumbre? -le dijo demostrando en aquella pregunta el deseo y lujuria po el. Despues de todo tendria que hacerlo, era su mascota y tenia que cuidar bien de él.

A pesar de no querer separarse del menor, queria ver como hacia lo que habia propuesto, y es que nunca habia visto algo como aquello, y no queria perder la oportunidad. No se negaba a participar en el juego, para nada, luego tambien usaria sus manos para estimularle.

Al ver el rostro del perro disfrutar con todo goce, de sus roces, suspiro sonriendo y tomo su mento para besarlo profundamente.
-Uehara... -susurro, casi en un gemido mientras posaba sus labios en los del menor, alejandose poco a poco de él.

-Comienza -le dijo cuando ya estuvo separado de el, dejo a la vista, la clara evidencia de su exitacion, y sin darle mas importancia solo se fijo en los movimientos de Yuuji.

Sin duda, el chico sabia bien como complacer a su amo, despues de todo, así es como lo traía, con ganas de él, de sentir su labios y todo su cuerpo junto al propio. Se deshizo de algunos mexhones que cubrian su rostro, colocando sus manos sobre las piernas de su mascota, acariciandolas suavemente.






U: Siento la demora.

Y como no gustar del cuerpo del chico si estaba tan bien mantenido y formado, apenas se aguanto las ganas de besar y lamer todo su abdomen, todo su cuerpo. Sobre todo al ver como humedecía sus dedos, imagino algo más que sus dedos en la boca del chico, ante esto, claramente y a la vista de ambos se excito más. Sus manos fueron más allá que sus muslos, sin molestar la acción que hacia el otro al estimularse, tomo su miembro y acerco sus labios hasta la punta de este. Quería verlo disfrutar de todas sus atenciones.

Al escuchar sus gemidos y jadeos, el mismo comenzó a hacer lo mismo, tomando su miembro para no desconcentrarlo y acariciándolo suavemente. Succionaba con fuerza el miembro del chico, y luego lo dejaba por unos segundos para que no se viniera tan rápido, sin duda disfrutaba de esto, lamiendo a veces solo su punta y masturbando el tronco del miembro. Con su mano libre quito la mano de Uehara de su entrada y con sus propios dedos comenzó a penetrarlo, moviéndolos rápidamente en círculos y tocando levemente su próstata. Sonrió y dejo le succionar su miembro y saco sus dedos de la cavidad del menor.

Rápidamente se situó entre medio de las piernas de Yuuji, tomando sus rodillas y separándolas.
-Listo? -le dijo seximente mientras le sonreía.

Lo besó apenas escuchó como le llamaba. Se inclinó más sobre su cuerpo y soltándose un poco de su cuerpo hizo que lo mirara directamente a los ojos, apenas rozaba sus labios contras los de Uehara y sus manos acariciaban su cintura; entró lentamente en él mientras veía su rostro excitado, lamió su labios y volvió a besarlo profundamente mientras comenzaba a mover sus caderas.

Alrededor de unos minutos estuvo de la misma manera, apretando el cuerpo del chico contra el suyo y embistiéndolo con fuerza y rapidez. Después de un rato separó un poco sus abdómenes para colar su mano entremedio de sus dos cuerpos y tomando el miembro de Yuuji, lo acarició lentamente, en contraste con la rapidez de sus embestidas, no quería hacer que se viniera tan luego, faltaba mucho para terminar.

Ya sin más, lo soltó por completo y se sentó en la cama tomando a Yuuji por la cintura y acercándoselo para darle un beso, el cual estaba lleno de deseo y pasión, algo desesperado y con fiereza, pero sin hacer daño a sus labios, quizá también demostraban algo de sentimientos, al suspirar en sus labios, lo abrazó con fuerza mientras sus manos acariciaban su espalda. Luego lo volteo e hizo que pusiera sus rodillas y sus codos en la superficie de la cama. Tomó sus caderas y llevo su miembro hasta la entrada del menor, entrando lentamente en él. Cuando ya estaba adentro, lamió su espalda y comenzó a moverse mas rápido, pero sin desesperación, no quería terminar con esta exquisita sensación tan rápidamente, quería estar el mayor tiempo posible con su mascota de esta manera.

Al ver como la mirada impaciente de Uehara lo buscaba se acerco a el rápidamente y lo abrazo con un abrazo, apoyándose solamente en una mientras seguía con sus embestidas, un poco mas lentas y placenteras. Con sus labios llego hasta las orejitas del menor, mordiéndolas levemente y lamiéndolas. Antes que nada quería ser cuidadoso con el, y no le importaba solamente sentir placer el, sino que también se preocupaba por que Yuuji se sintiera lo mejor posible, al parecer lo estaba logrando.

Adoro cuando lo llamo, excitándolo aun mas. Si, muchas veces lo había echo con hombres, pero esta nueva experiencia era genial, Uehara era exquisito, todo el era un delicioso dulce, quería tenerlo por completo, y le agradaba el hecho de que ahora solo fuera de el, por que solo él quería hacer que Uehara gimiera de esa manera... quería que solamente con él sintiera ese tipo de placer. Si, sonaba algo posesivo pero es que así era Mikami, y no soportaría que otro hombre se le acercara y que menos le hiciera daño. Se dio cuenta con esto que... aunque fuera pronto, ya quería al menor.

Entro aun mas en el alcanzando sus labios, lo beso profundamente, deslizando su mano que lo abrazaba hasta su miembro y masturbándolo rápidamente, mientras el lo embestía con rapidez y fuerza.

Siguió moviéndose con rapidez, lo soltó enderezándose y tomando las caderas e Uehara para moverlo contra su pelvis, mientras el se movía también. No dejaba de mover y aunque fuera repetidos aquellos movimientos no se cansaba de hacer y de escuchar los gemidos de Yuuji, los cuales le hacían continuar y no le permitían desistir de nada. Saco su miembro por completo y volvió a meterlo, repitiendo esto varias veces salió de el y se inclino sobre su cuerpo abrazándolo y enderezándolo con el. Se sentó en la cama y sentó al menor sobre su cuerpo, volviendo a penetrarlo lentamente, mientras gemía en su oído.

-U-uehara~ -gimió entrecortadamente, tomando su cadera y moviéndolo ahora sobre su entrepierna. No había manera de aburrirse de aquello, no había manera de separarse del delicioso cuerpo del chico, el cual lo provocaba como ningún otro.- Yuuji~ -por primera ves lo llamaba por su nombre, siguió embistiéndolo con fuerza, volviendo a masturbarlo con fuerza, apretando la punta de su miembro y estremeciéndose por la fricción de sus cuerpo y por lo estrecho que hacia su cavidad el menor.