Kyle Braud.

por Invitado Mar Ene 25, 2011 9:59 pm

●Nombre: Kyle.

●Apellido: Braud.

●Apodo: -ninguno por el momento-.

●Edad: Diecisiete años.

●Sexo: Masculino.

●Orientación sexual: Homosexual – Uke.

●Raza: León.

●Descripción psicológica: Que la apariencia no engañe: engreído, caprichoso, mandón, antojado y, sobre todo, demasiado egoísta. Tiene el carácter de un león; después de todo, es uno. Como bien se sabe, esta raza se caracteriza por creerse dominante, quejosa con todo lo que no le agrade y pocas veces se conforma con algo. Kyle es la perfecta y exacta muestra de esto, sólo a veces parece lo contrario (?). Nunca se queda callado al sentirse incómodo, y pide todos los lujos posibles para su persona cada que tiene la oportunidad, es decir, siempre. Domina mucho su lengua a la hora de hablar con otros, en varias ocasiones, llegando incluso a manipular. Lo esteriotipado, común y habitual no merece su atención, así como tampoco la merece todo aquél que sea aburrido a su parecer. Goza de lo nuevo y difícil, y más cuando él parece tener el control. Cuando no sucede así se desata un total cambio. Casi Radical, podría decirse: apenas verse minimizado por alguien con carácter más fuerte se vuelve sumiso, tartamudea, se pone nervioso, toma todo el comportamiento de un pasivo y hasta podría disculparse por su actitud anterior. Pero esto no dura mucho, porque es otra de sus mañas para engañar a las personas y salirse con las suyas. Sin embargo, puede que no sea así. Nada es seguro con él, especialmente si quiere camuflar su debilidad.

De carácter indomable, atrevido, orgulloso a morir, celoso y posesivo; toca lo suyo y conocerás lo que es un león (?). Es impulsivo muchas veces, pero es, sobre todo lo demás, astuto, perspicaz e inteligente, lo necesario para siempre salirse con la suya. Piensa las cosas aunque no lo parezca, y siempre juzga a las personas antes de involucrarse con ellas. Empezando a hablar sobre asuntos sentimentalmente amorosos, no es muy bueno. Si de reconocer sentimientos se trata, un tsundere se queda corto a su lado. Jamás ha gustado de nadie hasta el momento, por lo que no sabe hacer diferencias ni aclararse. Podría sonrojarse muy fácil con detalles, palabras o acciones que van más allá de lo sólo físico, verse tímido e inocente y parecer realmente tierno~~, que conste que es sólo en lo sentimental verdadero~~. En lo que sí es muy rápido es engatusando y provocando… hasta que le dejen claro su lugar de pasivo (?). Cambiando de tema, se avergüenza fácilmente con faltas pequeñas, ~~no con lo que SÍ debería avergonzarse~~, y es que su lado perfeccionista no le permite errores. Posee personalidad gatuna: perezoso, mimado, pide atención y su hobby es dormir. Es también serio cuando debe, maduro y sincero. Como cualquiera, tiene sus virtudes y defectos… aunque más parece tener defectos que virtudes (?). Ok, no.

●Descripción física: Comúnmente las personas se dejan llevar por su apariencia cuando lo ven por primera vez. Gran error; no es lo que aparenta. Físicamente expresa seriedad, tranquilidad e incluso, a los que dejan su imaginación volar, inocencia. Y es que, para qué negarlo, posee un encanto que se podría llamar angelical y elegante, aunque esto se debe muchas veces a la belleza exótica propia de un león blanco.

Si vamos primero por las características más generales, notaríamos que en verdad no es muy alto, para nada, sin embargo, su altura está proporcionalmente adecuada a su cuerpo y aparente edad. En pocas palabras no se le ve tan mal. Nada mal. Es de contextura delgada de nacimiento, con el vientre plano, por lo que su peso se mantiene igual coma lo que coma. Manos finas, espalda angosta y cintura estrecha, sin perder la forma natural de todo varón. Su piel es totalmente nívea, aterciopelada, lampiña y sin imperfecciones. Roza lo pálido pues no gusta del sol ni del calor, sin embargo, algunas zonas aún tienen algo de rosadas, por suerte. Cabello plateado, o blanco también, y corto hasta por el cuello. Algunas mechas caen como flequillo sobre su rostro, mas éste está perfectamente a la vista, viéndose todo muy ordenado y pulcro. Igualmente el pelaje suave que se muestra en sus orejas y cola es por completo blanco. Dichas orejas son pequeñas y redondeadas, mientras que la cola es delgada, con la punta peluda, como todo león. Oh, pero, si buscas probablemente no encuentres nada. ¿Por qué? Porque no anda mostrándoselas a cualquiera. Las tiene, sí, y las oculta perfectamente.

Sus ojos, de color celeste claro o gris, son agatados, medidamente grandes y con las pupilas pequeñas. No están retraídas, así son sus ojos (?), mientras que espesas y largas pestañas adornan su mirada penetrante y altiva, siendo éstas igualmente albinas aunque de tonalidad ligeramente más oscura. Tan juntas y abundantes parecen negras, o azules, pero no lo son. Sus cejas, en cambio, sí comparten el color albino de su cabello. Éstas son delgadas y finas, aunque pasan desapercibidas por el flequillo que en parte le cubre el rostro. Su nariz es respingada, perfilada y delicada. Labios suaves, muy levemente rosados natural y ni muy delgados ni carnosos. Tiene un porte elegante, soberbio e imperioso como cualquiera de su especie, sin embargo, puede darse que se muestre de lo más relajado y fresco. Si se trata de salud es bastante sano o, mejor dicho, aparenta ser bastante sano. Cuando se enferma sólo él lo sabe. Por orgullo no deja que alguien más lo cuide en ese aspecto. Es ágil gracias a su naturaleza de león, pero su fuerza no es nada de lo qué presumir.

●Gustos y disgustos:

→ Gustos: La buena comida, la carne selecta y los vinos caros. Si no es así se conforma con ensaladas, agua pura y postres, muchos postres. El té, la buena lectura, la comodidad y los espacios amplios en donde poder mover y remover a su antojo. Adora tener la atención completa de su amo, y si no la tiene, que se prepare a las consecuencias. No es inquieto, es realmente muy tranquilo, pero hacer travesuras para que su amo no le quite el ojo de encima es su mayor disfrute. Ama, por cierto, las frutas. Gusta de la tranquilidad, aunque no lo parezca, de las noches en especial (porque puede entretenerse leyendo sin ser interrumpido) y de dormir tanto como su cuerpo se lo permita. En general, las cosas buenas y aprovechables son de su agrado, pero ni él mismo sabe qué es lo que en realidad le gusta.

→ Disgustos: Su principal disgusto es que no le den la atención merecida, o que simplemente lo ignoren. En cierto modo es algo infantil en este aspecto; le gusta acaparar todo sobre las demás personas. Le desagradan el sol, el calor y el verano, o todo lo que queme, como el fuego. Odia los insectos –les tiene miedo-, los sabores amargos, lo común, los deberes, lo que no lleva a ningún lado o lo que no tiene un punto ni razón de ser. Siente sofoque e incomodidad en lugares con mucha aglomeración de gente, detesta que lo traten como “mascota” y si no tiene “su lugar”, lo exigiría a la fuerza. La infidelidad está más que obvio, así como también detesta los lugares muy estrechos y cerrados. Tiene más disgustos, muchos MÁS disgustos, pero estos son los principales.

●Historia: Kyle nació y creció junto a sus padres, también leones blancos, quienes lo criaron con toda la atención y el cariño del mundo. Sin embargo, al ser una raza difícil de hallar, no todo siempre fue color de rosa. No, porque el color rosa no basta para describir cuán bien se la ha pasado (?)… o bueno, él debería pensar así, pero no lo hace. Sus padres fueron asesinados, él fue raptado, llevado a Tokyo y desde ahí todo debió ser perfecto. Su secuestrador, un tipo que no pasaba de los veinte cuando Kyle tenía doce, era alguna especie de adicto a los animales. Y tenía dinero. MUCHO dinero. El hombre prácticamente nadaba en billetes, por lo que conseguir mujer para él era de verdad muy fácil. Pero no, teniendo una buena apariencia y dinero no tenía ni un perro que le ladre. Y Kyle no pretendía hacer ese papel, aunque se supone que para algo estaba ahí. El albino odiaba al tipo, el tipo amaba al albino y, muchas veces, Kyle fue tratado mejor que un rey. Otras veces no, porque era tan irritante con el secuestrador, que ahora ya venía a ser su “amo”, que lo ponía de mal humor y sufría las consecuencias. Se suponía que lo estaban “domesticando”, pero nah...

El chico tenía en su habitación –la cual su amo cerraba con llave y ~~MUCHOS~~ candados- todo lo que pudiera desear. Gracias al mayor tuvo una educación de primera: etiqueta, lenguas y todo lo necesario que un niño rico debe aprender, aparte de lo escolar, claro. No podía pedir nada más cuando se volvió tan engreído como lo es ahora, pues ya no se le ocurría cómo seguir sacando dinero al tipo. Y así fue creciendo, el hombre lo adoraba de manera ya enfermiza y Kyle se aprovechaba de esto. Pero, como toda historia (?), al final llegó el momento en el que todo se desplomó: su amo intentó abusar de él y no lo consiguió; Kyle fue demasiado listo y rebelde como para dejarse. Pero eso no fue lo malo, lo malo fue que el hombre empezó a cansarse de él al ver que no sería “retribuido”, y que todo lo que gastó en el menor había sido una perdida de tiempo y dinero. En todos los años que lo había engreído, cuidado, adorado y hasta lo creía divino (?), Kyle siempre le tuvo cierto rencor. No por haberlo secuestrado, sino por haber matado a sus padres, cosa que jamás le perdonaría le den lo que le den. Su amo recién entendió eso cuando no pudo tener al albino, y entonces optó por regresarlo al lugar de donde lo sacó. Pero sus padres ya no vivían, por su culpa, y además su adoración –entiéndase que aún lo era Kyle (?)- no podía regresar a un lugar así. Entonces fue gracias a que se enteró de una tienda de mascotas que Kyle fue enviado ahí. Su ex-amo esperaba que consiguiera alguien que lo sepa cuidar y adorar (?!) como él lo hacía, y que el albino no esté tan incómodo como lo estaba con él. Kyle, por su parte, hubiera preferido quedarse con él a estar en esa tienda para mascotas. Raro, y es que al menos ahí, junto al secuestrador, tenía todos los lujos que deseaba.

●Imagen del personaje:

Spoiler:

●Extras:
→ Se dice que si un león blanco se cruza en tu camino te dará felicidad. Kyle lo único que da son dolores de cabeza y problemas (?). Aunque quién sabe…
→ No come carne a menos de que sea carne selecta y del mejor gusto. Podría considerarse o mostrarse vegetariano sólo por no comer cualquier cosa.
→ Cuando bebe leche se comporta como todo un minino doméstico.
→ Se embriaga muy fácilmente. No es muy conciente de lo que hace en ese estado, pero sí lo recuerda todo después.
→ Habla varias lenguas. Cuando no quiere que alguien sepa qué es lo que dijo, usa dichos conocimientos.

●Nombre de la serie/manga/videojuego al que pertenece: Will O' Wisp.
●Nombre real del personaje: Emilio.

por Invitado Miér Feb 02, 2011 2:46 pm

Aceptada

Kyle Braud.

Kyle Braud.

Re: Kyle Braud.