De nuevo al Maid Café [Priv.]

Su rostro se enrojeció por completo mientras caminaba tras del chico. No sabia que hacer o decir solo punteaba sus dedos por debajo sin que la viera, al llegar al maid vio como rodeaba y llegaba al lugar que mas conocía, la misma puerta donde comenzó a sentir algo por aquel rubio de ojos color verde, se detuvo y cabizbajo con el sonrojo, lo abrazo sonriendo poco al sentirle de nueva cuenta. Si… no era una mentira, ahora ya podía sonreír mas y gustosa, era el chico por el cual a veces se estresaba por sus constantes acosos, pero tambien era la razón por la cual ella miraba hacia adelante para poder seguir caminando hasta este momento.
- Te extrañe… pervertido alienígena…-
Dijo aun abrazándole sin querer soltarle, para después mirarle con su típica expresión de odio y amor. Su corazón parecía irse estaba algo confundida y al mismo tiempo feliz de tenerle cerca.

Se mantuvo tranquilo esperando a que ella llegara a la puerta para que abriese esta pues ya no trabajaba ahí o por el momento eso pensaba, después de haber desaparecido por un tiempo fue lo más lógico que pensó. Mantuvo la mirada baja al suelo hasta que le vio acercarse y ser abrazado de repente lo cuál le tomó por sorpresa y por un momento se quedó viéndole de forma sorprendida la cuál en unos segundos desapareció para luego abrazarle de igual manera y mostrar una cálida sonrisa.

-Nunca cambias Misaki… este tiempo estuve pensando mucho en ti. –

Dijo en un susurro cerca del oído de la chica para que solo ella lo escuchara, ya que esto a nadie más se lo diría, ella era a la única que mostraba aquel lado “tierno”, claro que a su manera.

-Vamos Ayusawa.., llegaras tarde al trabajo... si te despiden nos quedaremos sin dinero y sin comer.. y yo tengo hambre. –

Le da palmaditas en la cabeza para después revolverle los cabellos y decir aquello en un tono infantil e desinteresando como siempre al igual que su rostro se mostraba aburrido y trataba de apurarle a entrar, no quería ponerse sentimental ni menos en su “re-encuentro”.

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Siento la tardanza pero me había quedado sin pc... Uu

Sonrojada miro al chico por debajo mientras sonreia algo feliz al escucharle, esas palabras.
- Me... me alegro...-
Se le separa y sonrie como siempre dentro del maid cafe, abrio la puerta y entro, a la brevedad que entro volteo a ver al chico.
-Nee... Usui... todavia vas a trabajar como cocinero parcial?-
Pregunto mientras que por otro lado la jefa del maid les observaba y sonreia mientras corria por su sobrino y las demas chicas para que vean que estaban otra vez juntos. Todas las chicas y el chico, fueron a verles y ella callo en un leve shock que termino cuando miro al rubio entrar a la habitacion.

Usser: No se preocupe... jejeje ]]

Cerró los ojos mientras esperaba a que abriese la puerta y entrar al café maid que ya tenía que no había ido aunque claro que no había ido por obvias razones de estar “encerrado”. Abrió los ojos y le miró fijamente un poco sorprendido aunque no lo demostraba su rostro el cuál se mantuvo serio e indiferente a todo momento, asintiendo. No pensó que le volviesen a dar el trabajo, al menos no, después de haber faltado tanto.

-Claro, así al menos podre verte más, Misaki. –

Dijo en un tono casi que la chica consideraría “pervertido” al igual que una sonrisa ladina se dibujaba en su rostro, la cual volvió a neutra al entrar y ver a todos recibirles en lo cual solo un “oh…” apenas audible dijo al ver a todos.

-Cuando será que regresare a trabajar o… hoy seré un cliente? –

Pregunto desinteresado, esperando por una respuesta de la peli-negra, aunque más que nada deseaba estar en una de las mesas tomando un té y un postre mientras observaba y “admiraba” como ella trabajaba, atendiendo a los demás clientes.

Al escuchar las palabras del rubio miro a la encargada, esta solo sonrio diciendo que seria bueno volver a verle en el trabajo pero que por hoy fuera cliente. Misaki sonrojada accedio observando que ninguna pensaba que ellos ya tenian una relacion un poco rara pero que le hacia muy feliz a ella.
-Per... pervertido alienigena...-
Suspiro la chica mientras le miraba algo desafiante como de costumbre
- S... si lo dice... asi sera...-
Dijo mientras caminaba a los vestidores, observando a Usui de reojo y sonriendo al no ser vista por las demas presentes.

Sonrio al rubio y despues dio media vuelta suspirando de alivio, susurrandose a su misma.
- Que buen... todo... sera igual... supongo...-
Lo utimo algo dudosa, pero aun asi asintio al chico para despues terminar de cambiarse y salir a atender a los clientes. Miro a la mesa del demonio y camino hacia ella algo lento pero directo. Sin embargo vio al fondo al tipico trio de chicos que en un inicio la odiaban y ahora la amaban por su vestimenta. Suspiro ya que aquellos chicos comnzaban a llamarla para que los atendiera ella personalmente. Miro de reojo al trio y despues volvio a caminar hacia Takumi, deteniendose justo frente a el y haciendo una reverencia como si fuese un cliente comun y corriente pero aun asi con una sonrisa tierna.
- Bienvenido... en que puedo ayudarle??-
Dijo con voz delicada mirandole directo a los ojos pero tiernamente.

Al estar sentado donde normalmente se sentaba y tomar el menú que ya tan bien conocía gracias a las muchas veces que iba a ahí solo lo había tomado para leerlo de reojo y perder un poco el tiempo en lo que su ahora "ama" iba a tomarle la orden y no paso mucho tiempo en el que a penas levanto la vista y frente a él se encontra la peli-negra son su tierna sonrisa.

-Quisiera pedir lo de siempre... un jugo de naranja y una de las copas de helado. -

Dijo a la vez que le sonreía ladino y observaba con detenimiento su rostro, sin duda le quedaba bien aquel traje y por ello había conseguido tantos "fans" en el café.

-Eso es todo.... extrañaba verte en aquel traje. -

Susurro como último tal vez la chica no le escuchara y si le escuchaba estaba seguro que recibiría uno de sus "insultos" que solo le causaban gracia y no los tomaba en serio.

Tomo la orden pedida del chico, dio una reverencia y camino hacia la cocina para dar la orden. Dejo la nota y fue a servirle a mas de los clientes en lo que estaba la orden. Despues de unos minutos fue llamada de nuevo para que dejara la orden al cliente. Toma lo pedido anteriormente y con una bandeja lo dejo en la mesa del rubio oji-verde, sonrio al ver a Usui y con una leve reverencia dijo algo tierna
- Espero le guste... amo...-
Esperando no haber tenido error miro a sus compañeras, las cuales no le dejaban de observarles, lentamente la jefa del cafe se acerco a Misaki y le susurro algo al oido que hizo sonrojar como nunca. Solo Usui le habia hecho sonrojar as, pero jamas se habia sonrojado tanto por las cosas que le decia al oido, ella algo noqueada por los susurros siguio escuchando bajando la mirada.

Tosio un poco y volvio a tomar la postura, sonrio delicada como si nada hubiese pasado. Se acerco un poco al rubio y le susurro.
- Calla... pervertido... termina de comer... y luego te iras directo a casa... hoy viene alguien importante... y si estas aqui tal vez alla problemas, despues de todo... ya lo conoces... -
Sonriojada tomo una servilleta y escribio en ella una direccion, se la entrego a Usui y despues comenzo a caminar hacia la cocina. Llego a la cocina y delicadamente se sento en el piso mientras se tocaba la sien. Aun sonrojada intento calmarse, ahora sus vidas iban a cambiar, tal vez el ya lo sabia, asi que tenia ue vivir tal y como estaban ahora.
Ella espero a que fuese llamada de nuevo, y asi fue, sin embargo aquella persona que iba a venir llego tiempo antes y Misaki comenzo intentar saber como esconder a Usui sin que lo viesen. Aquella persona era el hermano de Usui y segun lo que ella habia visto anteriormente no podia dejar que se lo quisiesen quitar... otra vez...

Usser: okaeri~!! ^^- ]]

Continuo comiendo un poco más de su postre, dejando la cuchara en su boca mientras escuchaba con atención lo que decía la peli-negra, por un momento no comprendiendo bien lo que quería decir con ello más juzgando el como le susurraba, bajo la mirada a la servilleta y la dirección que estaba escrita en esta sin tomarle mucha importancia. Antes de decir algo y terminar su postre escucho la campanilla de la puerta y una arrogante voz muy conocida, "a él se refería, cierto?" Se pregunto para si mismo sabiendo perfectamente porque se encontraba tan nerviosa la chica.

- Me estas tratando de "ayudar" en que no me vean? -

Sigiliosamente se levanto para quedar detrás de la chica y susurrarle al oido aquello con un tono casi sarcastico, tomandole con ambas manos por los hombros y cerrar los ojos con una sonrisa tranquila.

- Con que tratás que no me lleven... que linda puedes llegar a ser Kaichou~ -

Rió bajo divertido al ver a la chica tan nerviosa, alzo los hombros y suspiro resignado "que se le iba a hacer! se dijo mentalmente mientras tomaba tomaba a misaki por la cintura y la bandeja de que tenía cerca, caminando por la orilla junto con ella sin que su hermano le viese hasta llegar a la cocina y ahí dejar en una mesa la bandeja.

- No fué tan difícil, Misaki.. e incluso me pude traer conmigo con premio. -

Sonrió juguetón dando a entenderle que ella era su lindo "premio".

Quedo paralizada ante las palabras de Usui, no sabia que decir o hacer, sus piernas no le reaccionaban, tenia que ir a atender al hermano del rubio porque si bien había dicho la jefa del café ella tenia que ir a atenderlo después de haberle conocido un poco mejor, solo ella era la única que podía contra el, sin embargo la llegada de Usui complicaba la situación pues ella no quería que se lo quitaran y provocara que jamas lo pudiera volver a ver, intento recapacitar y justo cuando volteo hacia el asiento donde se suponía estaba el rubio obres verdes, sintió como unas manos cálidas tocaban sus hombros y lentamente al oído una dulce y melodiosa voz algo sarcástica pero agradable para ella, sin mas giro un poco en su lugar y quedo frente a frente con el joven mientras que todas las chicas ponían atención a sus acciones, aunque como siempre el hermano ni siquiera tomaba atención, suspiro un poco y bajo el rostro al piso para que no le viese estaba totalmente roja pero no por eso quería decir que era totalmente débil.
No pudo decir absolutamente nada pero el hecho de ser llevada a la cocina en horario para atender a un cliente como el hermano de Usui tal vez le quitaba algo de "puntos" en su trabajo, sintió su cuerpo nunca responder a su mente, si ella pensaba quitarlo solo le dejaba hacer, si quería decirle "déjame" sus labios callaban rotundamente; estaba totalmente mal, ya no podía hacerle nada deseaba zafarse pero ¿como hacerlo? si su cuerpo no le respondía? acaso quería que el mismo hiciera eso? esto era mas difícil que haber estado en la misma escuela por un tiempo. Al parecer sera mas difícil ahora en su situación actual.

Siguio que el joven haga lo que quiera, pero simplemente era algo tonto como su cuerpo no respondia por si mismo, el detenerlo de llegar a la cocina provocaria alguna discusion, contra el o la gerente pues su hermano comenzaba a preguntar por ella. Pero no es porque la quiera o esas cosas si no porque era la unica que estaba en mayor cercania con Usui, se separo algo brusco de el, tal y como acostumbraba cuando antes la abrazaba.

Tu... no te metas en problemas y quedate aqui, vere como distraerlo para que salgas de aqui...

Le dijo lentamente mientras que levantaba la mirada hacia el joven, no sabia que mas responder solo quería que el estuviera bien, quería alejarlo de los problemas en especial con su hermano pero no sabia que hacer o como, lentamente recordó cuando una vez le había dicho que no lo haga por los demás si no por si misma, la mente le daba vueltas, tomo su cabeza y cerro los ojos mientras le apartaba

Tardare un poco, por mientras intenta buscar en que perderte, pervertido alienigena...

Dijo entre susurros, casi no se escuchaba, pero aun así camino hasta donde estaba la salida para encontrarse frente a frente con el hermano del chico rubio, el joven la miro con fríos ojos y la gerente solo observo como la chica se imponía ante el chico con dulces acciones. Al parecer el chico intentaba hacerla enloquecer, sin embargo ella haría todo porque no le vuelvan a quitar a la persona que mas detesta y quiere al mismo tiempo.

Bienvenido amo... que desea comer hoy?... oh, por favor venga a sentarse... venga le mostrare un buen lugar para comer...

Así se la pasaba, lo llevo a un lugar con algo de privacidad pues el motivo era impedir que viese a Usui por los lugares, y la mejor forma que este en un lugar algo lejano de los demás, y en especial de la puerta principal y de la cocina.

Siguio escuchando los alardeos del hermano mayor, ella solo sonreia y le decia cosas crueles, pero no se inmuto pues no queria que algo malo pasara, suspiro un poco llendo a otras mesas para bajar su estres, para luego ser llamada de vuelva por aquel joven, intentando calmar sus ansias de golpear al chico, solo, intentando retener todo su ser. Después de unos momentos, después de estar como en un interrogatorio por un acto que ella no había cometido, escucho salir a alguien de atrás de la cocina, entre abrió los ojos esperando lo peor en su caso, tembló un poco, y consecutivo se tenso al ver los rubios del joven, parpadeo sin entender, y se sonrojo al sentir el agarre. ¿Que le sucedía si le veían? se lo llevaría y jamas podría volver a verle?, no, no quería eso, mucho menos después del tiempo no verle, no quería dejarlo ir, sus ojos, su mirada, su sonrojo, su sentir lo cubro un poco con su fleco, entre cerro los ojos y miro al hermano del rubio, diciendo con voz débil, pero con seguridad.

Reconozco el hecho de que todo este tiempo hayan estado buscando a Usui, pero... este pervertido tiene que elegir por si mismo en que lugar quiere estar, no me importa si he desprestigiado a mi familia o a su familia por el hecho que el no quiere regresar con ustedes, pero... esto... esto es solo que... que no quiero que se vuelva a alejar de mi, y tampoco...

Tenso un poco los hombros mirando al chico frente a ella, frunciendo un poco el entrecejo y con los ojos en su defecto rojos, por sus ganas de llorar, aunque no lo podía hacer.

Quiero que lo alejen de mi, pero... si el ya no quiere estar conmigo, estaré feliz, porque se... que el mismo tomo la decisión y nadie le dijo que tenia que hacer...

Termino de decir mientras aferraba una de sus manos al brazo ajeno, como si no lo quisiera dejar ir, de esta forma se mantuvo un tiempo mas, hasta darse cuenta de todo lo que había dicho, pero en verdad dijo esas cosas? parecía que se le había declarado por segunda vez, en su mente recordó breve mente la vez en aquel festival de otro instituto, y cuan cercano era el con ella. Cerro los ojos y respiro un poco para calmarse, soltando el agarre que le había hecho al rubio y de paso el que el chico le estaba haciendo al momento.

Lentamente observo algo sonrojada al chico de rubios cabellos, no sabia que hacer, estaba totalmente sonrojada por su propio comentario, habra callado al hermano mayor de Usui, pero ella misma estaba comenzando a reprimirse, paralizada dejo que Usui hiciera lo que estuviera haciendo pues no le importaba, por el momento, lo que le hiciera, sabia que tal vez su comentario le dolio al hermano, pero al rubio le agrado; y eso mismo es lo que queria.
Suspiro un poco agobiada al ver como el joven de cabellos negros salia del maid, mientras que uno de sus sirvientes pagaba la cuenta. Miro un poco atenta y exclamo algo interesada en el mayordomo que al parecer era alguien que conocio en el pasado.

Tu... no eres el mayordomo-ninja?

Pregunto mientras que lentamente le señalaba, cuando se dio cuenta de lo que hacia entreabrio los ojos y bajo la mano rapidamente para luego pensar "no seas mal educada, recuerda que ahorita eres maid", el mayordomo por su cuenta solo parpadeo un poco y siguio su camino sin inmutarse, despues de todo la seguia odiando, levanto la mirada y sonrio un poco susurrando

Tal vez sigue siendo verdad

Volvio a suspirar llendo hacia Usui, lo tomo del cuello de la parte trasera de su camisa y lo jalo a la cocina, tal vez escucho lo que el chico le dijo, pero no lo puso tanta atencion, una vez dentro de la cocina lo miro y solto, para luego caminar con la mirada hacia abajo hasta los vestidores.

Otra vez lo hiciste, me volviste a ayudar cuando yo queria ayudarte... porque jamas puedes entender, si tu hermano no estuviera mal, sabes bien que te llevaria a la fuerza, pero, porque saliste? no quiero que te quiten de mi lado, nunca, entiendes, Pervertido?... nunca...

Su mirada nunca le vio, solo eran las palabras las que se dirrigian al rubio, queria mirarlo pero no podia otra vez.

[perdón por tardar, pero como estoy en casa y en vacaciones, casi no me dejan tomar la maquina... gomen]

Frunció un poco el entrecejo al escuchar sus palabras, miro a otro lado mientras que hacia que su mirada de alejara de la ajena. Detestaba querer a ese chico, solo le causaba problemas, pero odiaría tener que alejarse de el, su mente estaba algo lejana, no sabia que pensar en todo eso, no era lógico, su vida dependía de lo que hiciera, pero a la vez no dependía de ello. Era como un gran revolvedero dentro de su mente. Odiaba ver su sonrisa, pero al mismo tiempo le agradaba verla, su mirada la hipnotizaba algo momentáneo, no sabia como reaccionar contra el, al parecer fue y sera el unico con el cual reacciona de esa manera, pero aun asi desearía no poder tener esos sentimientos. El beso a la frente fue mas de lo que ella misma hubiese pedido, pero sus mejillas se tornaron de un rojo cálido y casi rosado al momento de sentir sus labios rozar su piel. Esto era mucho comenzaba a propasarse de nuevo.
Pero que hacer en estos momentos?, claro darle la espalda y mostrarse fuerte de nueva cuenta. Si eso es lo mejor.

Claro que me preocupo... pero no por eso creerás que ahora te dejare mas libre, recuerda que ahora vivirás conmigo, y te daré varias re...

Parpadeo un poco al intentar digerir por si misma sus propias palabras, "vivirás conmigo" eso dijo ella? #no puede ser# pensó para sus adentros, este momento la paralizo por completo, su piel se erizo un poco y sin mirarlo cubrió su mirada la cual bajaba al piso para que no la viera, sin embargo esto era mucho, esto era totalmente un caos para ella y sus adentros.

Digo... quiero decir... vivas donde vivas... yo.. no... no te dejare de vigilar, porque... porque te acabo de sacar de un lugar que parecía una prisión, aunque igual y te hubieras escapado, pero recuerda, jamas te dejare hacer lo que se te plazca...

Digo algo "furiosa" pero no estaba enojada con el chico, era con ella misma por no poder calmar su sentir, era lo peor de lo que podía pensar, poder sostener una mascota que en algún momento fue la persona que mas quería y sin decir nada se fue del lugar, era un completo revoltijo de cosas las que pasaba por su mente y ella no sabia que hacer en esas circunstancias aparte de ser fuerte y no aparentar debilidad, no en este momento y mucho menos frente al rubio oji verde que siempre le hace cosas que aparentan buscar su debilidad.

Giro la mirada con el entrecejo fruncido haciendo un leve mohín al escuchar las palabras del rubio.
No me importa donde duermas, solo te advierto que conmigo no dormirás, y mucho menos en mi habitación, pervertido alienígena
Dijo mientras se acomodaba su falda maid, miro el reloj observando que el tiempo se le iba muy rápido, primero la compra, después la llegada inusual del joven como su petto, el medio tiempo como maid del café y ahora lo mas difícil de decidir, saber donde lo acomodara en la casa, suspiro algo agobiada y le dio la espalda intentando pensar que hacer con el joven, “el sillón, seria buena idea pero es un pervertido… no… no… no…” negó un poco con la cabeza “conseguirle una habitación a parte pero cercana para que cada uno viva algo libre” no, seguro buscaría la manera de llegar con ella y hacerle cosas mientras duerme, de cualquier forma ella saldría perdiendo, tomo su cabello con ambas manos y revolvió un poco su peinado, ¿Qué hacer? ¿Dónde dejarlo? Ha pasado mucho tiempo desde la ultima vez que estuvo en una escuela, pero no por eso la ultima, también seria bueno dejar que sigan las cosas como puedan, en su casa… fue lo único que paso por la cabeza de la joven, miro de un lado a otro pensando en dejarle en el lugar pero sus pensamientos fueron inútiles, lo único que tenía en mente era poder estar feliz con él, pero sin que el hiciera cosas innecesarias, después de todo era algo común del joven hacer tonterías.
Suspiro un poco y bajo la cabeza sin mirarlo, no sabía qué hacer, de nuevo su mente era un caos, un caos que ni el mismo Usui podía detener, necesitaba de alguien para que le dijera que hacer, tener a Usui en su casa sería lindo pero al mismo tiempo algo muy arriesgado. Si alguien logra verlo la tomarían como una chica fácil, nada bueno para su vida cotidiana, aunque habrán quienes piensen que ella sería buena chica, ama de casa y esposa, eso de ser maid ayuda, pero es un lio.
Camino unos pasos hacia ningún lado y lentamente la joven gerente del lugar casi a gritos le dijo
“Misaki!! Creo que sería mejor que vayas a casa, siento que te sientes muy mal… además Usui debe estar exhausto de estar todo el tiempo aquí en la cocina sin nada que hacer aparte de bocadillos, o no, Usui-san?”
Sonrió la dulce y joven gerente para luego salir del lugar, dejando a Misaki con un rostro de derrota, si era el peor momento para retirarse y más aun cuando ella no sabía donde dejarle de momentos.