Maid Café

Verano del año 1987, dos pequeños muchachos de siete años acudían cada uno de sus días a una de las pastelerías cercanas a sus casas, eran buenos amigos y siempre se ayudaban mutuamente, incluso tenían pensado en poder abrir una cafetería cuando tuviesen la edad suficiente para ello.

Los años pasaban y el entusiasmo era cada vez mayor, acudían incluso a esa misma pastelería para aprender cada truco y arte al hacer cada dulce con aquella dedicación y delicadeza, todo el proceso era increíble y ambos chicos, tras el paso de unos diez años, a las edades de los diecisiete, ya incluso comenzaban a sentir atracción entre ellos por tal ilusión con aquella vida, cediéndose incluso sus primeros besos.

Pero todo se empezaba a oscurecer de poco en poco. La economía de la familia de uno de los jóvenes escaseaba y con ello no podía ayudar al otro a poder construir sus “reinos” mientras que el otro joven se hacia de fortuna ante un aumento en el empleo de su padre.

El joven adinerado, sin ayuda de su compañero y amigo, abrió la cafetería que tanto ansiaban ambos tiempo atrás, con eso le quería dar a entender a su amigo que no hacia falta que ambos pagasen todo a medias, uno podría poner una cosa y el otro otra, pero al parecer ese entendimiento no fue el correcto.

El muchacho que en ese momento escaseaba de economía miraba rabioso y con recelo a su mejor amigo o al que lo era, gritándole y reprochando le su crueldad y egoísmo, cosa que al muchacho mas adinerado le dejo bastante shockeado, por lo que desde ese mismo instante se despidió por siempre de aquel que fue su mejor compañero, confidente, amigo y amor.

Actualmente, el joven que era de economía débil, consiguió estar en algún que otro empleo, entre esos empleos consiguió reunir la suficiente fortuna como para comprar un colar y mas que nada, este se encontraba situado en la misma calle y frente a la cafetería de su antiguo amigo.

El joven adinerado cada día estudiaba junto a su maestro, tras el paso de veinte años, a crear nuevos modelos de pasteles, queriendo crear lo nunca visto, queriendo hacer su cafetería mas popular. Su maestro era un joven pastelero de cuarenta años, era atractivo y siempre y solo a el le mostraba una buena sonrisa en el rostro, cosa por la que aquel joven termino enamorándose de el, pero aquella felicidad tenia un corto tiempo para seguir disfrutando de ella.

Días mas tarde se encontró cara a cara con el que años atrás fue su amigo, algo que realmente le dejo fuera de lugar y sobretodo al ver que le hacia la competencia o al menos eso era lo que parecía, pero no por ello se rendiría, le ignoraría y el mismo se haría con el poder.

En ese mismo espacio de tiempo, un grito se escucho dentro de la cafetería del joven adinerado, quien corrió rápidamente hacia el interior de su cafetería, rompiéndose en mil pedazos cada rasgo de esperanza y felicidad que su cuerpo portaba cuando sus ojos presenciaron aquel inerte y fallecido cuerpo de su maestro, al cual asesinaron duramente, dejando como mínima pista el botón de una blusa.

El joven aprendiz se acerco hasta su maestro, escuchando sus ultimas palabras, las cuales fueron que el fuese su sucesor, que se quedase con su puesto. Realmente el dolor que el joven adinerado sintió en su pecho ante la muerte de aquel hombre del que se había terminado de enamorar quedo su corazón hecho mil pedazos, cambiando su actitud aun mas de lo que ya la tenia.

No descansara hasta saber quien fue su asesino pues la policía no pudo encontrar al posible culpable y mas aun, ¿de donde provenía aquel botón?. El joven y nuevo jefe del Maid café no descansara hasta descubrir si su asesino es su antiguo amigo de infancia o alguno de los trabajadores de este, al menos eso quiere creer ante la ceguera de su odio..