Nuevo comienzo [priv. Tsuna]

Miro al joven Usagi salir detrás de la puerta de donde se encontraba el vendedor, sonrió un poco haciéndole señales para que vaya con el, sonrió un poco mas dando reverencia
Un gusto Tsuna-kun, soy Edgar Ashenbert… un conde y desde hoy… a tus servicios, si deseas puedes llamarme Ed o Edgar, como gustes me será de agrado
Diciendo esto, podía vérsele un sonrojo en sus mejillas,un sonrojo que mostraba que el estaba siendo atraído por los efectos del alcohol que había ingerido en horas pasadas no muy lejanas,suspiro un poco y recobro la postura elegante extendiéndole la mano como un buen mozo o mejor aun [para algunas] un mayordomo con vestimenta negra y fino carácter además de que tenia un gusto exquisito para los sabores y olores, tal vez por esa razón quiso al joven petto que se encontraba en su mirar.
Espero a que el joven tomara su mano para que en consecutivo caminara a la salida no sin antes ir a darle las gracias al buen vendedor que le atendió, y también darle una reverencia con suma esterilidad. Llegando a la calle miro al joven Sawada y con voz dulcificante pregunto
Dime Tsuna-kun, ¿Que deseas hacer ahora? Tal vez tomar algo de te o café, ¿ir de compras? O quizás… ¿desees ir a casa para descansar de este día tan turbiante?
Sin quitar una leve sonrisa de sus labios solo le miro y espero respuesta, como siempre lo hacia sin decir nada, solo esperar, estaba cansado solo de hablar y dar ordenes, quería cambiar y al parecer una compañía como la de el Usagi le seria de mucha ayuda. Concretamente demasiada ayuda como para ser un joven tímido y con mirada inocente.

[Perdón la tardanza]

Sonrió con lentitud posando una mano en su cabeza, de verdad que el alcohol es malo, y en especial para el. Diciendo para su interior algo cansado la típica frase, "no volveré a tomar... lo juro" Suspiro algo agobiado pero para no mostrarlo tanto sonrió al joven.
Oh claro, si quiere comprar, a comprar iremos... no me es una molestia ni inconveniente

Sonrió un poco mas y dio la vuelta para señalarle un lugar en especifico con uno de sus dedos.
Por allá están las tiendas, boutiques y esas cosas...

Volteo un poco la cabeza e hizo señas para que le siguiera, pues el camino era algo tardío y no quería que sus acompañantes de la vida o guardianes le siguieran a todos lados, solo que antes de comenzar a caminar volteo un poco su cabeza hacia el pequeño castaño y haciendo un guiño con el ojo derecho
Vamos, sígueme no quisiera que te perdieras...

Dijo con voz dulce y algo atrevida para después extenderle una mano para que le tomara y ahora si, comenzaran a caminar, una imagen de pareja se le vino a la mente algo rápido, y solo volteo la cabeza pero sin bajar su mano que extendió al joven.