OMG!~Necesito compañia/Daimaru/

Jade sin duda alguna necesitaba compañía, no era de su costumbre vivir solo y aun cuando le obligaron a trabajar a fuerzas estaba en compañía de alguien ya fuera buena o mala. Siemrpe había un persona a su lado y ahora, simplemente vivía solo, había perdido contacto momentáneo con sus padres y eso tampoco le agradaba, pero ese el precio por haber renunciado a su antiguo trabajo, si es que se le podía llamar trabajo a lo que hacia antes.

Asi pues y a sabiendas del atractivo de la ciudad de Tokio, Jade decidió que era hora de buscar una “mascota” se había tomado el tiempo de buscar una ciudad que ofreciera una buena oportunidad de vida asi que debía de aprovechar que en esa hermosa y atractiva ciduad se ofrecia un servicio como ese, claro que no estaba del todo de acuerdo con el hecho de que se vendieran a personas diferentes pero no era quien para jusgar el por que del negocio.

Motivado entonces por su solitaria vida, Jade acudió al lugar donde se comercializaban aquellas peculiares criaturas. Eran como las 4 de la tarde, hora perfecta para salir, no había mucha gente y el sol estaba de lo mas agradable. No tardo mucho en llegar al lugar, por ahora vivía en un hotel, gracias a su trabajo Jade ganaba bien asi que podía costearse un hotel de alta calidad y posicionado en un lugar estratégico. Quedaba casi a mitad de la ciudad lo cual le daba fácil acceso a los lugares.

Después de una caminata agradable, por fin llego al lugar. Abrió la puerta y hecho una mirada curiosa, sencillo pero lindo. Sin demorar mucho, se acerco al mostrador.-Buenas tardes…vengo en busca de algún pet, no tengo conocimiento de que razas pueda tener asi que estoy abierto a sugerencias.-Le comento al dependiente, una vez le informara de las razas podría saber bien que era lo que quería.




OFF: Aviso, no tengo color aun y mi nombre todavia no es modificado pero mi ficha ya esta aceptada.

Bueno, la verdad no supo contestar a sus preguntas, puesto que no tenia idea de que queria o de las razas que se vendian en el lugar. Pero bueno no habia por que preocuparse, de cualquier modo, algo debia de encontrar ¿cierto?. Emitio un suspiro ligera y se quedo pensante. Su mirada divago para poder encontrar apoyo en la tienda, algun dato que le indicara algo bueno, que le diera una minima idea.

Miro entonces un pequeño cartel que indicaba algunas razas, sin embargo eso no fue lo que le llamo la atencion, sino que al parecer en el cartel se mostraban a dos mascota femeninas, similares, se podria decir que eran hermanas, eso sin duda le hizo recordar algo. Miro al dependiente y emitio una sonrisa ligera.-Bien, es la primera vez que vengo, pero habia escuchado por ahi, que tambien esta la posibilidad de comprar dos pets, hermanos obviamente, en caso de que tengan,me interesaria ver algunos de ellos, hombres los dos a ser posible.-con sus palabras obviamente se referia a pagar inclusive el doble por los dos, sabia que no podrian vener igual de costosos dos pets que uno solo por lo cual, sabia a que se atenia en caso de llevarse al paquete completo.

A los gemelos les sorprendió que delante de su “jaula” apareciese uno de los trabajadores de la petshop, ya que no era ni su hora de comer ni la de ducharse, así que Daidalos despertó a su hermano y ambos salieron y fueron conducidos por uno de los estrechos pasillos de aquel lugar.
El albino se escudaba tras su hermano el cual bostezaba de vez en cuando. – Nii-chan ¡no estés tan tranquilo! ¿No ves que esto no es normal? Nos han sacado fuera de hora y a nosotros solos- el mayor hacia un puchero mientras se aferraba a la ropa de su hermano.
-Nii-san…. No deduces de esto….. que nos han comprado-pregunta retórica hecha por el menor que miraba de reojo al otro.
-Vale, si, es eso- soltó las ropas de su hermano y se colocó a su lado, aún así le dio la mano a su hermano menor y la apretó con fuerza diciendo con esto que estaba algo asustado pero en la cara del mayor había una sonrisa.

Ambos llegaron hasta una puerta, allí el hombre que iba con ellos les paro y les quitó el collar de metal que portaban, les dijo que detrás de aquella puerta estaba su nuevo amo y que se portasen bien con él. Ambos karasus asintieron pero fue el menor quien abrió la puerta dejando que ambos pares de ojos color vino se entrecerrasen a causa de la claridad de aquella sala.

Ambos visualizaron a su nuevo amo en un santiamén, aquella melena rubia no era nada discreta. Los hermanos se miraron y Daidalos con curiosidad y las manos a la espalda se acercó a él mientras que el menos se quedaba a una distancia prudencial. -¿Tu eres nuestro amo? Encantado, mi nombre es Daidalos y aquel ser oscuro de ahí detrás es mi hermano Daimaru- le señalaba mientras el moreno hacia una reverencia. –Gracias por comprarnos, necesitábamos salir de allí tenemos las alas entumecidas. ¿Ne nii-chan?- los hermanos se pusieron uno frente al otro y, como si se desperezasen, estiraron sus enormes alas.
-Y usted….¿cual es su nombre?- plegaron las alas.

Spoiler:

Jade espero paciente, era un hombre de personalidad seria por lo cual la paciencia y el sentido del tiempo era algo que sabia bien como manejar. Mientras esperaba a que su par de compañeros llegaran, se dedico a pensar en que haría de ahora en adelante, podría ejercer su carrera de nuevo como cantante, aunque eso pudiera significar que los hombres que le tuvieron como esclavo y a los cuales hizo por demás ricos le pudieran encontrar, pero no había otra cosa que quisiera hacer, por ahora se presentaba en un pequeño bar todas las noches o casi todas las noches, la paga era buena y podría mantener bien a sus “mascotas” pero le preocupaba el no tenerles muy mimados, pues había que mencionar que Jade, era alguien que le gustaba darles facilidades y gustos a sus amigos y conocidos, ahora no se diga que no haría por ese par de hermanos que captaron su atención y que eran ya su responsabilidad.

Tras esperar unos momentos, Jade alcanzo a divisar como una puerta se abria y aparecían ya, sus hermosos gemelos. Su primera impresión fue que definitivamente eran perfectos, tan contrastantes a simple vista y tan bien parecidos, ofrecían una buena vista y muchas especulaciones se alojaron en su cabeza. Se levanto de su asiento tranquilo y miro como el primero se acercaba, sonrió tranquilo, algo sorprendió por esas alas que se habían desplego, eran hermosas pero mejor dejaba eso para cuando ya estuvieran en su casa. Asintió, pero al ver como el segundo se acercaba Jade encaro una ceja, sin duda eran parecidos a la descripción que ofrecía la ficha, o mejor dicho, mejores que lo que ofrecía la ficha.

-Me llamo Jade Curtiss, y de ahora en adelante seré su….amo…-Dijo eso ultimo mas como una pregunta para si mismo.-No tienes nada que agradecer ,Daidalos.-Agrego su nombre, Jade era muy conservativo y no le costaba mucho el aprenderse el nombre de los demás y tampoco recordar cosas de importancia.- para mi es un agrado tener a semejante compañía, yo se algunas cosas sobre ustedes, pero ustedes aun desconocen todo sobre mi, salvo mi nombre, así que supongo que nos tomara algo de tiempo el poder llevarnos bien.-Explico tan tranquilo y mirando por unos momentos al par de gemelos, sereno como siempre, por ahora mantendría al margen su personalidad pervertida.

A Daidalos se le subieron los colores cuando su nuevo amo dijo su nombre, por supuesto no pudo evitar ponerse las manos en la cara – Que mono.- pensó para luego reaccionar ante las palabras de Jade -¿Eh?- colocó los brazos en jarra –No tranquilo, si no sé nada de ti ya lo iré averiguando, por cierto, tienes un nombre la mar de bonito- sonrió alegre mostrando una dentadura blanca que contrastaba con su piel morena. –ne nii-chan, ven, ven, no seas tan antisocial que Jade te va a coger manía- Daidalos ya trataba a su amo con soltura.

El menor de los karasus desvió la mirada unos segundos para luego acercarse a Jade. Daimaru, al contrario que su hermano, es bastante alto y sólo le pasaba unos escasos centímetros al rubio. Daimaru realizo una profunda y respetuosa reverencia – Mi nombre es Daimaru Azai…. Porque también tenemos apellido… nii-san-

-Si, si- puso los ojos en blanco como quien habla con un loco. –Bueno, como ya estamos todo presentes ¿no vamos? ¿verdad?- Daidalos entusiasmadísimo daba palmaditas –Nii-chan llévalo tú que estas mas fuerte- Daidalos ya había abierto la puerta de la tienda y salía fuera.

Por supuesto al salir el sol le hizo algo de daño en los ojos, así que se los tapó con las manos –Nii-chaaaaannn- reclamó con un tono de voz infantiloide. Daimaru salió y entornó su único ojo a la vista para consolar a su hermano poniéndole una mano en la espalda.

El menor volvió a entrar y a colocarse, como una pared, delante de Jade –Con su permiso- dijo serenamente mientras se encorvaba para, a continuación, levantar a Jade en brazos como quien levanta a una novia recién casada. Salió afuera donde el hermano mayor ya veía. –Nos vamos-

-YEAAAAAHHHH- ambos cuervos miraron al cielo con determinación. De repente dos pares de alas batieron al unísono y cuando se fueron a dar cuenta se encontraban a unos 60 metros del suelo.
-¡¡¡YUJUUUUUUUUU!!!- Gritaba de la emoción –Mira, mira nii-chan, la ciudad que pequeñiiiiita. Hacía mucho que no estirábamos las alas ¿verdad?- decía divertido mientras Daimaru, que sujetaba a Jade como si su vida dependiese de ello, sólo asentía con la cabeza. Ambos cuervos eran libres en el aire, porque es su elemento y son felices. Las dos pares de alas negras se batían proporcionando un fuerte sonido.

-Curtiss-dono… ¿A dónde nos dirigimos?- preguntaba a si el menor por la ubicación de la casa del rubio. - ¿Se encuentra bien?... ¿prefiere bajar?- se preocupaba pero sin cambiar la expresión seria de su rostro.

(off: creo ke deberíamos cambiar de lugar XDD)

La verdad le encanto que Daidalos tuviera ya de buenas a primeras una confianza extrema con el, era buena manera de empezar su relación. Sin embargo no podía decir lo mismo del otro cuervo, aunque tampoco le molesto que este se viera distante, era natural, quizás era el primero amo que ellos tenían y obviamente sería el único pues para Jade, pese a no querer llamarse amo, ya les consideraba de su sola propiedad. Sonrió un poco, calmado, mientras esperaba la presentación del segundo cuervo. Se notaba que tenían una relación algo rara, mientras que uno de los hermanos era alegre y jovial el otro era mas reservado.

Se sentía maravillado por ser ahora acompañado por ese par de hermanos tan peculiares. Su única preocupación de ahora era el agradarles por completo pues tampoco quería tenerles afuerzas a su lado, y por lo visto ya se había ganado la confianza de uno.

Pronto miro como el otro hermano se acercaba, hizo una reverencia de igual modo correspondiendo a su gesto y sonrió escuchando su nombre que tenia un parecido divertido con el de su hermano.-un gusto Daimaru…-Dijo tranquilo y sereno. La diferencia física entre ambos hermanos era notoria lo cual les daba un toque mas excepcional, Jade era alto pero era superado por apenas unos cuantos centímetros por el segundo cuervo.

Así pues y teniendo bien hechas las presentaciones, considero que era hora de retirarse. Pero el peliblanco le robo las palabras por lo que asintió y sin comprender el segundo comentario se encogió en hombros; se dispuso a salir pues, pero pronto fue sorprendido por un acto algo poco común….

El pelinegro quien había salido con su hermano, ahora se encontraba bloqueándole el paso, Jade no lo tomo de mala manera pero sintió curiosidad y cuando escucho sus palabras y le miro agacharse, pues ciertamente no supo que hacer, busco como sujetarse de el y le miro con clara sorpresa y con cierto deje de incertidumbre. Sin embargo supuso que era lo que iban a hacer, y siendo si primera salida, pues no dijo nada con respecto a ello.

Asi pues y sin esperárselo pronto se vio en el aire. Le daba miedo, claro, Jade era un simple humano que no estaba familiarizado con ese tipo de cosas pero estaba abierto a probar acciones nuevas, por lo que se dedico en silencio a mirar el panorama. La emoción de Daidalos le gusto, se sentía contento y tranquilo de solo verle por que esa sonrisa de felicidad solo indicaba que le había gustado el salir por fin de esa tienda.

Sin embargo cuando Daimaru le hablo, Jade volteo su mirar.-No te preocupes, estoy bien……-Aclaro pues pese a que en un principio sintió miedo, ahora estaba solo con una sensación rara en el estomago debido a la situación en que se encontraban.-Bueno, quizás seria mas apropiado el llegar primero a casa, para que se familiaricen con ella, y mas tarde, podremos salir para hacer unas cuantas compras.-Jade tenia que comprarles todo lo necesario para que pudieran vivir comodamente, quizás alguno que otro caprichito que quisieran, por ahora solo quería tenerles agusto en su nuevo hogar. ASi pues y mientras volaban, Jade alcanzo a divisar el que seria de ahora en adelante el hogar de los cuervos.

Su casa estaba localizada en un sector residencial calmado y tranquilo, era grande considerando que solo vivía Jade ahí, pero ahora seria perfecta para que los tres vivieran juntos. Desde lo alto se veía pequeña pero se podía apreciar desde lejos lo lindo del lugar. Esperaba que fuera de su agrado y si no…pues podrían remodelarla mas adelante.


OFF: OMG! ame que Daimaru cargara a Jade xDDDD!! se ve genial que un suke carge a su seme x3!!!! *W* contigo no me voy a aburrir de rolear
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Amm si hay que cambiar de lugar, hago el post y te mando el link por mp *W*