Sin descanso (libre)

por Invitado Sáb Mayo 07, 2011 2:09 pm

La noche había estado más que agitada; heridos por doquier de heridas pequeñas e incluso algunos que llegaban con objetos de lo más extraños incrustados en partes de pesadillas. Y es que tomar el turno nocturno era el mejor pagado pero sin duda el más agotador.

Se encontraba en la sala de descanso tomando un café para intentar reponerse de todo lo que había tenido que correr en esas horas, y aún así sentía como la cafeína ya no le hacía efecto, al parece había tomado demasiada durante sus estudios y ya era inmune a ella, algo así como tomar un remedio demasiadas veces y luego sentir que no tienen más resultados que lamer un caramelo.

-Brff...- Fue lo único que pudo salir de su boca cuando se acomodó en el mullido sofá sintiendo como sus ojos pesaban, de pronto el vasito de plástico resbalaba de sus manos ya vació y caía al suelo mientras los alto parlantes llamaban a varios doctores a urgencias o se daban anuncios públicos. Ella ya no oía nada, se encontraba profundamente dormida.

por Invitado Dom Mayo 15, 2011 9:46 pm

Había estado diambulando por el Hospital, durante casi 8 horas, por el simple hecho alguien tenia el olor de la sangre 0 negativo y no lograba dar con tal persona, realmente era una tortura irresistible, le daba sed, demasiada y la sangre artificial no producía efecto o al menos a ella le pareciera que no estaba llena por completo.

Observó como tantas personas estaban lastimadas, cortadas, enseyesadas, operadas, realmente no cuidaban sus vidas, ella con su sangre podía curar las enfermedades más extremas y raras, por el simple hecho de que su sangre era la de un Vampiro Puro.

Se sentó resignada en la Sala de Descanso, acomodansoce lo más que pudo para relajar un poco todo su cuerpo, que lo sentía arder, y pedirle a gritos que hiciera algo que lo calmara, levantó un poco la vista y vió a una enfermera dormida en el asiento del sofa, ¡era ella!, se acercó tambaleante hacia ella.

Ya casi estaba cerca solo la separaba un metro y pico de su sangre, de su salvación, pero tropezo con su pie y cayó sin más de cara contra el suelo, sus reflejos ya no servían, y sus emociones eran una mezcla, por ello lloraba desesperada y casi de una forma infantil, todavía sin levantarse del suelo, tenía hambre y estaba cansada.

Termino enojada, porque le dolio mucho la caída y no tenía fuerzas para ponerse de pie, y el resto de las personas miraban todos como espectadores sin inmutarse, si, Yuri se sentía pá-te-ti-ca, entre sollosos dijo - N-no se ri-an.. ¿P-p-porque n-nno me ayud-dan? - humanos estupidos, no se preocupan por nadie más que ellos, me dan verguenza ajena.

Spoiler:

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