Pasado [Priv.]

por Invitado Lun Nov 29, 2010 5:44 pm

El laboratorio de agricultura de la universidad de Tokyo era un área donde no pasaba demasiada gente, dado un nulo grado de popularidad. Estaba claro que había carreras mejores que estar mirando a través de un microscopio a seres unicelulares esperando ver algunas mutaciones de los mismos, pero para él era tan fascinante e importante como un futuro oficio de derecho. Aquel sería el lugar donde dedicaría la mayoría de sus experimentos de allí en adelante tras decidir que rumbo quería que tomase su vida.

Souichi Tatsumi compartía con sus hermanos pequeños la casa familiar que sus padres les habían dejado tras su desafortunada muerte. A sus veinticinco años tenía la responsabilidad de una familia a sus espaldas, por lo que cada día intentaba superarse, ser el mejor en su campo y darle buenas enseñanzas a sus hermanos. Aunque habían ciertos aspectos de su personalidad que no era recomendable que aprendiesen...

No había tenido demasiados problemas en el casi año que le siguió. Había tenido muy pocos asistentes, por no decir ninguno, que hubiese durado lo suficiente como para poder conocerle. El don de gentes de Tatsumi era prácticamente nulo, y su odio por los homosexuales era conocido por todos los pocos conocidos cercanos que tenía. Por supuesto, y a pesar de tener un futuro prometedor como científico, su reputación dada su personalidad de “tirano” hacía que muchos decidieran que era mejor ser el auxiliar de algún otro. Y era lo normal...

– He oído que tiene un nuevo titular para su equipo, Tatsumi-san -uno de sus compañeros se había acercado al banco del jardín donde estaba sentado a la hora de la comida. Había dejado una solución casera haciendo reacción dentro de la máquina del laboratorio, por lo que tenía al menos veinte minutos libres.

Separando los labios de la pajita del batido de fresa, alzó la mirada y miró a su interlocutor. Ahora que se lo recordaba, se suponía que aquel mismo día debía conocer a su nuevo “asistente de laboratorio”. Según había leído en su ficha de entrada era un joven bastante despierto. Pero ni siquiera recordaba su nombre.

– Si, eso parece -respondió al final. Supuso que el rector le guiaría hacia él para hacer las presentaciones, y Tatsumi solo esperaba que no le tocase algún crío con aires de grandeza o le tocaría darle de hostias para espabilarle antes de echarle de su aula de una grandísima patada.

por Invitado Miér Dic 01, 2010 10:20 am

Despues de tanto tiempo y ciertos problemas al fin llego a la universidad, tantos esfuerzos merecieron la pena para poder cursas lo que mas queria, sonriendo se paro frente a la entrada, el dia era brillante y algo en su interior le decia que su vida iba a cambiar a mejor, o no... pero siempre debia ser positivo en eso.
Tomo aire para sentir todo a su alrededor, era gratificante todo aquello, y lo mejor de todo era que estaria ahi unos cuantos años, amigos nuevos y muchas vivencias, menos mal que en esos dias habia conseguido un pequeño apartamento para vivir todo este tiempo ya que sino estaria en serios problemas.
Apreto fuerte el cinto de su mochila y con una gran sonrisa anduvo por el campus, viendolo entero, estaba muy ansioso por conocer al senpai que le instruiria en su campo, seguro que llegarian a ser grandes amigos, no pensaba hayar un amor, ya que queria meterse de pleno en los estudios, aunque tampoco lo descartaba, ya que liges podia encontrar en cualquier lugar, ya que tokyo era bien conocida por sus bares gay en el centro y el ya tenia uno que frecuentaba desde que se instalo semanas atras.
Camino por el lugar viendo a las diferentes personas del lugar, asi que saco un papel del bolsillo para ver en que aula estudiaria y en que laboratorio le tocaban la spracticas, y se decidio primero por el laboratorio, asi al menos le echaria un vistazo ya que las aulas todas eran siempre iguales y no le interesaba cojer un asiento en especial, asi que se encamino por el pasillo mirando las placas de las puertas aver si hayaba rapido el laboratorio asignado.

Despues de un rato, cruzandose con varias personas a las que saludaba con una grata sonrisa y que le era devuelta, encontro su destino, deteniendose frente a la puerta muy nervioso, aquello parecia pequeño pero miro donde quedaban las otras puertas de cada lado y se veia un poco grande, pero tambien debia tomarse en cuenta el interior de largo, no ancho solo, asi que tomo el pomo de la puerta nervioso y lo giro para asi abrirlo, asomandose nervioso con una sonrisa.
- con permiso... - dijo timido y se encontro a dos personas adentro ya, los miro y se sonrojo leve al ver al joven de pelo largo y gafas, quedandose un poco hipnotizado por su belleza ¿acaso se habia confundido de laboratorio? supuso ya que habia un mayor y un joven adentro.

[PD: los padres de tatsumi no estan muertos XD solo la madre, el padre esta siempre de viajes de negocios xDDDDD]

por Invitado Dom Dic 05, 2010 9:01 am

Tras la comida, y calculando con precisión el tiempo que había pasado desde que había dejado sola la solución, Tatsumi se levantó el banco, atravesó el campus y volvió al edificio. Enfiló los pasillos hasta llegar a su aula, la cual vio abierta. Acercándose a zancadas y con una mirada que delataba que mataría a quien se hubiese atrevido a meterse allí sin permiso y toquetear sus cosas. Al ver la cara de rector simplemente suavizó la expresión, mirando discretamente a su alrededor en busca de su asistente, no viéndolo. ¿Es que se había equivocado de día y no venía hoy?

-Tatsumi-san, le estaba buscando -considerando que estaba metido en su laboratorio, aquello era mas que obvio...-. Le he dado a su nuevo asistente la dirección del aula. Estará al caer.

“Eso suponiendo que no se quedase dormido después de estar de juerga durante toda la noche” -pensó el científico, entrando y yendo directamente a su mesa de trabajo, viendo el temporizador de la máquina. Siendo un universitario, no podía pensar otra cosa del “nuevo”, a no ser claro que se demostrase lo contrario.

-Te encantará -continuó solo el rector- Es un chico despierto y listo. Así que por favor, no hagas que quiera cambiar de carrera... -el pobre hombre había visto renunciar a muchos asistentes. Pero aún había visto a mas que se negaban a serlo- ¡Oh, aquí está!

La vocecilla del chico al abrir la puerta no hubiera llamado en absoluto su atención de no ser por el hombre que le acompañaba, que recalcó su llegada con una sonrisa entusiasta. Tatsumi se giró, subiéndose las gafas redondas para mirarle.

Era un joven moreno, que no tenía cara de ser precisamente “despierto”, pero si tranquilo. Al menos no le daría el coñazo. Era alto, desgarbado y con un aire muy soñador, cualidad que le hizo levantar una ceja.

-Bienvenido, chico -el rector le estrechó la mano, llevándolo luego junto al otro-. Este es con quien trabajarás.

El castaño levantó la mano, sonriendo sutilmente, esperando que el moreno la estrechase.

-Soy Tatsumi Souichi.

Spoiler:

por Invitado Dom Dic 05, 2010 8:36 pm

vio acercarse al mayor que lo tomo y guio hasta el joven, sonriendo todo el rato por pura costumbre al estar nervioso y ansioso, oyo hablar tranquilamente al hombre hasta que señalo al pelilargo, diciendo que ambos trabajarian juntos, eso le hiso sonrojar solo un poquito, pero de pura emocion por no haberse equivocado de aula.
- Morinaga Tetsuhiro - se presento tras oir el nombre de su senpai y estrecho su mano con determinacion y con una amplia sonrisa - es un placer senpai - su sonrisa siempre inocente se mostro frente al que seria su mentor en estos años de universidad, esperaba aprender mucho pero... habia algo que no le dejaba estar tranquilo, pero no le dio mucha importancia ya que era minusculo.

por Invitado Dom Dic 12, 2010 12:02 am

Estrechó la mano de aquel chaval, que apenas le superaba en altura. Verlo mas de cerca le hacía reafirmar que no era un chico especialmente sagaz, aunque eso lo comprobaría en cuanto el rector saliese por la puerta, lo cual no tardó en pasar.

-Espero que te entiendas con Tatsumi-san -le dijo el viejo al moreno, dándole un afectivo toque en el hombro- Suerte -aquello último lo había dicho mirando a Tatsumi, como en una pasiva advertencia. No quería ver a nadie correr de su aula nunca mas. Luego, sonriendo, se retiró, dejandoles solos para que comenzaran pues su aprendizaje.

Una vez la puerta dio contra el marco, Tatsumi dio media vuelta, dirigiéndose a la máquina donde tenía la solución, que se había pasado segundos antes.

-Deja tus cosas por ahí y ayudame con esto. ¿Tienes alguna idea de microorganismos? -sacó la pequeña probeta con tapa de la máquina, mostrandole una solución que se había tornado en azul claro- Llevo un tiempo estudiando la reacción que tienen las bacterias ante ciertos tipos de componentes. Como se duplican, como se expanden y como reaccionan a los cambios atmosféricos o al entorno.

Explicaba todo sobre la marcha, sin mirarle, sacando una base plana, donde estaban los especímenes que ahora vigilaba con tanto cuidado. Señaló tras de si, a alguna de las mesas.

-Prepara la lupa binocular y el microscopio óptico -ordenó sin mas, centrado en sus soluciones.

por Invitado Lun Dic 13, 2010 6:31 am

Se quedo quieto en el citio donde estaba desde que entro, oyendolo atentamente, se notaba que era un senpai, tanto conocimiento de los proyectos era admirable, no pudo evitar emocionarse y se veia claro en su rostro, la sonrisa y las mejillas arosadas lo delataban, derepente el mayor le dio unas ordenes asi que dejo la mochila en un rincon donde no molestaria y fue a por los objetos pedidos, que no tardo en hayarlos, asi que los tomo y los deposito en la mesa, preparandolos para su buen funcionamiento, habia tenido practicas en su ultimo año, ya que era una preparacion para no estar parado en el laboratorio, no le gustaba eso, asi que estudio por su propia cuenta un poco mas, aprendiendo todo para ser util en ese lugar y no empezar mal, queria ser de utilidad para el senpai, no queria meter la pata y que le regañara, la emocion de estar ahi le comia por dentro, tenia ganas de gritar de emocion pero mejor contenerse, ya iria a celebrarlo al bar esa noche y a contarle a su amigo como le fue, ya que la noche pasada le visito para comentarle y este le habia dado animos ya que estaba muy nervioso.
Miro de reojo al senpai, sonriendo, parecia buen tipo y fijo que le enseñara muchas cosas.
- esto.. senpai ya estan puestos - dijo sonriendole - ya puede utilizarlos

por Invitado Jue Dic 16, 2010 7:25 pm

-Perfecto -comentó, llevando las dos probetas planas de superficie blanca hacia donde estaba el joven aprendiz, por llamarlo de alguna manera. La bata blanca que llevaba Tatsumi volvió a hondear cuando dio media vuelta y trajo después consigo la probeta del líquido azul, la cual le mostró a Morinaga para comenzar a darle un corto resumen de lo que estaba haciendo con aquellas muestras. En una había pegada una etiqueta que restaba “Fototrofas”, mientras que la otra decía “Autótrofas”; lo cual también pasó a explicarle.

-Esta muestra está siendo expuesta a la luz en un modo de que crezcan y se reproduzcan, mientras que esta otra está infectada de dióxido carbono. Hay que suministrarle ciertos tipos de mezcla para ver si el proceso se ralentiza o por el contrario se acelera -alzó la mano y se peinó con los dedos el flequillo a un lado, subiéndose luego las gafas redondas- Hasta que puedas tomar como tuyo algún experimento, me ayudarás con estos dos.

Dio unos pasos al frente, levantándose las gafas, colándose entre el cuerpo del moreno y los microscopios, a los cuales se inclinó para colocar bajo la potente lente, logrando una vez bien ubicados verlos en todo su esplendor. Palpó a tientas la mesa.

-¿Donde...? Oye, Morinaga. El cuentagotas -señaló a alguna parte de la mesa, mientras parecía demasiado centrado aumentando el grosor de una de las lentes-. La proteína debería ayudar a reactivar los filamentos... -murmuraba para si mismo, aún con la mano extendida.

Spoiler:

por Invitado Mar Dic 21, 2010 9:56 am

no pudo evitar el sonreir tontamente por esos movimiento de parte de su senpai, era grandioso el ver como se centraba en ello, penso que jamas conoceria a alguien tan metido en eso en ese mundillo, y ahi estaba, la flor y nata del mundo cientifico y era su senpai, tenia mucha felicidad metida en el cuerpo y eso que aun estaba nervioso por ser su primer dia, y su senpai de pronto le pidio el cuentagotas, asi que con rapidez lo tomo y con cuidado se lo paso al mayor, no queria meter la pata o algo para caerle mal, ya que si la cagaba al principio, seria duro estar a su lado todos los años de practicas que le tocaban, asi que daria su mayor y mejor esfuerzo en todo.
- aqui tiene senpai - dijo al darselo en la mano tendida, rozando sus dedos con los suyos, haciendo que de pronto un pequeño latir despertara en su pecho, haciendole sonrojar muy levemente, algo que le sorprendio la verdad, no se lo espero para nada.

[por mi vale -w- lo que desee senpai~~♥]

por Invitado Dom Dic 26, 2010 8:10 am

Cogió a tientas lo que le había pedido, sin dejar de mirar por el microscopio, toqueteando los dedos del moreno hasta que sintió el frío cristal del cuentagotas, mientras hablaba y le continuaba explicando todo lo que necesitaría saber para encargarse de los demás especímenes que habían dentro de la máquina de conservación. Al alejarse tras echar dos precisas gotas de aquella sustancia sobre la muestra, le cedió un momento para que observara. Después de todo, allí era donde comenzaba su aprendizaje.

Sin embargo, y a medida que pasaban los meses, Morinaga pudo ser testigo de muchas de las malas manías de su senpai. Desde sus malas mañanas, su mal humor, su trato que pasaba de la hostilidad y su particular forma de hacer las cosas. En el aula era donde parecía sacar a relucir aquella especie de aura maligna que tenía alrededor, ya que no dudaba en dejar claros los fallos de su estudiante a base de gritos. Muchos creían que Morinaga era el único en su historia que no había huido a los primeros dos meses. Era mas; tenía un carácter de perrito seguidor que nadie se explicaba...

A solo dos meses y medio de cumplir el año juntos -cosa que Tatsumi no llevaba al día. Solo sabía que hacía bastante tiempo que llegaba y veía la cara de cachorrillo de Morinaga-, se desató el desastre. Y es que uno de los odios mas arraigados de Tatsumi había hecho, por fin, acto de presencia a modo de gritos de ira nada contenida.

La puerta se abrió, y un sombrío senpai la había atravesado aquel día. Su aura decía claramente “estoy enfadado, agotado y con ganas de matar a alguien”. Un pequeño flashback de su hermano pequeño confesándole la fatalidad volvía a su cabeza una y otra vez como una mala película en blanco y negro.

-¿Por que tiene que pasarme a mi esto? ¡Es injusto! -mas que caminar parecía flotar encima de una gran nube negra. Al levantar la vista, el denominado “saco de boxeo personal” estaba allí, sonriente, brillante, feliz... Lo cogió de la pechera, acercándose- Morinaga... -voz de ultratumba- Por que existen, ¿eh? ¿¡Y por qué han pervertido a mi hermano!?

Lo zarandeó, como si el pobre chaval tuviera la culpa de todo. Estaba colérico y poco le faltaba para llorar sangre.

-Malditos gays... ¡Los mataré a todos! -espetó, con una mirada ya incoherente en el rostro.

por Invitado Mar Dic 28, 2010 4:59 am

Despues de aquel primer dia de aprendizaje y conocimiento al lado de su sempai, los dias parecian de rosa, aunque ese rosa poco a poco se volvia algo grisaseo al comenzar a conocer al mayor poco a poco, en cierta forma tenia.... mal humor, y otros muchos defectos se le sumaban a ese, haciendole ver como una persona bien mala.
Pero el no lo veia asi, ya que aun con defectos, el lo veia diferente, cosa que sus compañeros no entendian, siquiera entendian como podia estar feliz en asistir a sus clases de practicas con semejante sonrisa e impaciencia.
La cosa era peor cuando iban a llegar a un año de conocerse, eso le ponia aun mas feliz, y se le ocurio un gran plan, ¡Fiesta! ya que iban de aniversario, le encantaria invitar al sempai a tomar algo para festejar ese añito de aprendizaje, se le ponia una carita de tonto cada vez que lo pensaba, y lo peor fue que el sempai entro en el cuarto pillandole con esa carita, asi que volvio a su cara de siempre saludandole pero ni le dio tiempo cuando este de pronto le agarro y zarandeo soltando toda clase de insultos y quejas... y ahora en contra de los gays...
Bueno, el sabia del trauma de su sempai, ya que un gay le intento ligar... o mas bien abusar, cosa que le espanto demasiado y ahora para colmo... ha pasado algo con su hermanito, recordando la foto de familia que le mostro una vez el mayor, su hermanito era lindo y por lo que sabia, habia entrado en la universidad ¿habra pasado algo malo? solo sabia por esos griterios que el tema trataba de su hermanito y los gays... mala combinacion para el sempai... era como un coctel asesino.
- tra-tranquilizese sempai - rio nervioso al no saber que podria recibir - ca-calmese y cuenteme, si?

por Invitado Vie Ene 07, 2011 7:56 am

Mientras pensaba que había un complot contra él y las numerosas formas de eliminar a los gays de la tierra y que pareciera un accidente, la voz de Morinaga le llegó, lejana. Le miró, con las cejas fruncidas al extremo, aún recordando la cara de aquel desgraciado que se había plantado en la puerta de su casa cogido de la mano de Tomoe. La escena de su pequeño e inocente hermano diciéndole que había encontrado el amor y no sabía cuantas mas tonterías con aquel tipo se repitió tantas veces en su cabeza que llegado a un punto ya dejaba de tener sentido.

-Tomoe... con ese Kurokawa... -la voz parecía deslizarsele entre los labios sin apenas moverlos, y el mal aura que cargaba encima se hizo tan palpable que pronto llenó el laboratorio- ¡Dicen que han empezado a salir! ¿¡Que mierda es esa!? -lo volvió a zarandear, soltándolo luego a un lado y caminando a zancadas hacia la mesa, dando un golpe en ella con las manos abiertas, buscando algún químico con el que desahogarse.

Quizás si le llenase la comida de algo podría curarle de su homosexualidad. Seguro que era una tontería, cosas que pasaban a aquella edad. Hay curiosidad, la adrenalina se dispara, te acuestas con chicos... ¿A quien quería engañar? ¡Aquello era absolutamente asqueroso!

-No vas a ganarme, Kurokawa... - masculló siniestramente. Se puso los guantes de látex y cogió las gafas de cristal grueso para protegerse los ojos. Luego llamó a Morinaga, como si fuese algún tipo de perro adiestrado- ¡Morinaga, el ácido! -estiró la mano demasiado seriamente- Exterminaré a ese microbio si él mismo no quiere desaparecer de mi vista.

Necesitaba o matarlo o perder el sentido bebiendo para ahogar sus penas y frustraciones.

por Invitado Vie Ene 07, 2011 5:00 pm

al fin estar suelto de su agarre, vio como su senpai perdia el control, eso era demasiado la verdad, estaba fuera de sus cabales!
pero... aun cuando decia cosas ofencivas, y sin conocer sus sentimientos, no podia odiarlo ya que... aunque costaba admitirlo, le gustaba aquel tirano.
Se levanto y de pronto oyo a tatsumi llamarlo, asi que por acto reflejo fue hacia el como perrito pero de pronto se paro al oir la peticion de su amo, cosa que le espanto.
- pe-pero senpaai!! eso-eso no puede hacerloo!! - exclamo alarmado y se interpudo entre el senpai y el acido - qu-que le parese si vamos a tomar algo? jejeje - pregunto nervioso con la smanos en alto para detener su avance - sabe, hoy es un año que comenze a estudiar con usted, y queria que fuesemos juntos a celebrarlo, yo invito - dijo sonriendo con esa gran e inocente sonrisa suya, esperaba que aceptase ya que realmente deseaba que el senpai pasase ese dia con el, ya que al no tener el valor de la confesion, podia al menos compartir su tiempo con el.

por Invitado Sáb Ene 29, 2011 12:18 pm

Centrado estaba en su maquiavélico plan de asaltar a Kurokawa y exterminar cada célula de su cuerpo, cuando la molesta llorera de Morinaga le llegó desde un lado, interponiéndose entre él y su arma definitiva. Le lanzó una mirada envenenada, y pareció como si su cabreo se solidificase en una aura negra capaz de estrangular a su aprendiz.

-Esto no se arregla bebiendo, Morinaga -le trepó hasta cogerlo de la pechera de la bata de laboratorio, acercándose mientras seguía exudando feromonas diabólicas- ¿Que parte de “mi hermano se cree gay” se solucionará bebiendo yo? ¡Hay que exterminar la raíz del problema! -como siguiera dándole tanta importancia acabaría proponiendo clavarle una estaca en el corazón a su cuñado como último recurso.

Sin embargo, una vez soltó a Morinaga y comenzó a mover de sitio las probetas para calmar sus ansiedades, pareció llegarle lo último que había dicho. Resoplando y chasqueando la lengua, miró de reojo al moreno, peinándose el tupido flequillo hacia atrás con los dedos.

-¿Un año? ¿Ya ha pasado un año? -por un instante vio como al menor le crecían orejas y cola de perro solo para poder levantarlas, emocionado. Se quitó la bata blanca y pasó por su lado, dándole un golpe en el hombro antes de colgar la prenda en la percha junto a la puerta, cogiendo su chaqueta- ¿Por que llevas la cuenta de algo así? Me da escalofríos. ¡Muévete! Invitas tu, ¿no?

Se puso la chaqueta, corrió la puerta con evidente mala leche y enfiló el pasillo. Mientras bebiese tramaría como cargarse a Kurokawa. O intentaría olvidarse de la noticia que le había dado su hermano hacía tan poco...

por Invitado Sáb Ene 29, 2011 3:55 pm

se sorprendio de que este aseptara de pronto, era un alivio el ver que no tomaba esa arma peligrosa para dañar a alguien ya que podian encerrar al senpai y eso era lo unico que no queria.
Suspiro aliviado al ver que desistia por ahora en esa lucha sin control, sonriendo luego como un tonto al notar ese apreton en su hombro y que luego se iba, feliz se quito la bata bien rapido y la colgo al lado de la de tatsumi, tomando su chaqueta y muchila para asi seguirlo como siempre, era verdad que era escalofriante el que siguiera esas cuentas pero para el era importante ya que desde el primer dia seguramente ya sentia eso por el senpai y seguramente no se lo contaria jamas, asi que al menos tenia el consuelo de tener esos pequeños detalles, ademas, debia admitir que jamas vio al senpai con una mujer, siquiera se puede imaginar dicha situacion, es.... demasiado irreal, y no es por que su hermanito pequeño se liara con un hombre, es solo que... no entraba en su mente, ya que el senpai jamas hablaba de mujeres ni nada por el estilo asi que le resultaria raro verlo de pronto con una mu... no... seria horrible! su cara empalidecio al solo suponer que un dia de pronto el senpai apareciese con una mujer y le dijese que es su novia o prometida... eso le mataria de golpe.
Tomo aire para luego soltarlo en un suspiro mientras contemplaba la espalda del senpai, sonrojandose leve por la vision, ese hombre siempre tan tirano le parecia siempre tan lejano... y el queria alcanzarlo, tocarlo, sentirlo!...
Se paseo la mano por la nuca, sabia que eso era imposible, que era solo un sueño, ya que el senpai era homofogo.... pero, era tan malo quererlo?

por Invitado Lun Ene 31, 2011 4:22 pm

Caminó por los pasillos, haciendo que gracias a su evidente aura de antipatía mas de uno se apartase de su camino -o al menos, los pocos que aún andaban por allí a aquella hora-. Se colocaba la chaqueta, agitando los brazos, mientras daba largas zancadas, doblaba para bajar las escaleras y se dirigía directamente hacia la puerta de la universidad. Pasaban de las cinco, y el color fuego del cielo precedía poco a poco a la noche, por lo que era un buen momento para ir a algún bar y planear su homocidio tranquilo.

Apartó la pesada puerta de cristal y salió, escuchando apenas a Morinaga detrás de si. Le rechinaban tanto los dientes que apenas escuchaba el barullo de la calle al poner un pié fuera; aunque si tuvo que detenerse cuando una fría brisa le hizo tener un escalofrío. Fue cuando se dio cuenta de que se había alejado ya diez metros de la Universidad. Se frotó los brazos, gruñó y se metió las manos en los bolsillos tras ajustarse la maleta al hombro.

-Oye Morinaga, ¿dónde se supone que vamos? -tenían la opción de ir a algún bar o pub y beber hasta caer inconscientes. O comprar cerveza y colarse, por la cara, en la casa de aquel chaval. Sacó el teléfono móvil y buscó en su directorio el teléfono de su casa. Avisaría a su hermana de que llegaría tarde- No quiero encontrarme con ningún raro como Kurokawa o acabaría fastidiándome aún mas la noche... ¿Nanako? -escuchó la voz de la niña al otro lado, explicándole que tardaría y que podría cenar sin él.

Spoiler:

por Invitado Lun Ene 31, 2011 4:45 pm

[que crueldaaaddd XD]

Vio a su senpai ir bien rapido y eso le apenaba, ese hombre realmente era mesquino, pero aun asi lo seguia sin parar, mas de un compañero lo vio y le saludo, a loq ue morinaga le devolvia la sonrisa y el saludo, pero no se detenia para asi no perder al senpai de vista, no queria dejarlo solo, ya que aunque era fuerte y demas, era tambien muy vulnerable.

De pronto en menos de unos minutos, estaban ambos fuera de la universidad, viendo sorprendido lo rapido que habian salido de ahi, era algo increible la verdad, pero bueno, mejor eso a estar dando vueltas, la cosa era... que harian ahora? irian a un bar? mejor no... el senpai tenia la mala costumbre de liarla parda en esos lugares tras beber, asi que mejor ir a su casa.
Se paro al lado del senpai que terminaba de hablar por movil.
- nee.. senpai, que le parese ir a comprar bebida y algo para picar y vamos a mi casa? asi cuando caigamos bebidos no pasara nada - le sonrio inocente como siempre, no sabia el por que pero ese dia tenia una sensacion extraña, como un mal presentimiento.

[prefiero que se lo diga junto a la confesion al dia siguiente de beber XD]

por Invitado Lun Feb 07, 2011 10:21 am

Escuchó a su hermana decir que no había problemas y que tuviese cuidado. De paso, le había mandado sus saludos a “su asistente”, recalcando de paso que cuidase de él. Por supuesto, no era algo que fuera a decir en voz alta, y menos a Morinaga. Colgó, miró a su alrededor y luego desvió la vista al moreno con aquella expresión tan característica suya, que mostraba molestia, irritación; con los labios hacia abajo y las cejas fruncidas. No podía quitarse el tema de su hermano de la cabeza, y eso le molestaba. Y pasaría bastante hasta poder adaptarse y asimilar que Tomoe era Gay... ¡Pero que no lo era! Solo estaba confundido, ¡nada mas! Seguro que ese capullo liante de Kurokawa le había dicho -o peor, hecho- algo para que pensase de pronto de manera tan absurda.

Tatsumi llevaba un buen rato quieto en el mismo lugar, desordenándose el pelo tras el arrebato de furia que le había dado nuevamente. Tras bufar, contestó al fin a la propuesta de Morinaga, echando a andar hacia algún Minimarket.

-Compraremos un par de bolsas de cerveza y despotricaremos hasta el amanecer -gruñó, pasando las calles y aprovechando un semáforo en rojo para pasar, caminando a zancadas. A medida que se alejaban de la universidad y traspasaban callejuelas el ambiente iba siendo menos cargante, aunque por aquellas horas el tráfico era de lo mas insoportable que había. No sabía donde vivía Morinaga. De hecho, en aquel casi año que llevaban juntos no había preguntado mucho por él. Ya que había aguantado tanto sin largarse, como la mayoría, quizás debiese empezar a preguntarse cosas personales sobre aquel muchacho con el que compartía laboratorio.

-Entonces, ¿vives solo, Morinaga? -preguntó al cabo de un rato, dentro de la primera tienda que vio, junto a una tienda de accesorios que ya cerraba sus puertas. Tenía una cesta colgada del brazo, y una gran montaña de cervezas ya en ella. Ahora, miraba los aperitivos, no decidiéndose entre los de queso o los de Jamón cocido. Se mantenía recto, cuan alto era, mientras la coleta que siempre se hacía le caía por el hombro, sobre la chaqueta. Levantaba una ceja al darle la vuelta a las bolsas y mirar los ingredientes. Al final acabó soltando ambos en la cesta y continuó por el pasillo, haciendo nota mental de comprar también cigarrillos para toda una noche.

Spoiler:

por Invitado Lun Feb 07, 2011 4:12 pm

se habia visto claramente que el senpai seguia molesto dandole vueltas al asunto de su hermano, pero al menos iba a ir a su casa por primera vez y eso lo hacia muy feliz, menos mal que era una personal limpia, asi que no tenia problema alguno en llevarlo a su apartamento.
De pronto el senpai le hiso tal pregunta que hiso que el moreno se sonrojara, ya que era la primera vez que hacia una pregunta sobre su vida personal, haciendo que le diese un vuelco en el corazon, sonriendo amplio se le aserco un poco.
- si, vivo solo - contesto alegre.

De pronto su mirada se podo en el cuerpo de ese compañero suyo, realmente tenia buen tipo, o mas bien, era su tipo. Pero eso lo hacia ciertamente peligroso, ya que parecia que ciertamente la sangre de la familia tatsumi atraia a los de la otra acera...
Eso le hiso recordar cuando empezo a trabajar para el senpai, habia un profesor extraño que le rondaba siempre cerca y que al final se descubrio que era gay y lo peor, se habia lanzado sobre el senpai... dios menos mal que le salvo, ya que si llegaba un poco mas tarde.... a saber que habria pasado... mejor ni pensar en ello.

Palido hasta la medula, se recupero volviendo a sonreir para que el senpai no dijese nuevamente que era raro o algo peor... asi que le ayudo con la compra para que no cargase todo el peso.
- serca de mi casa hay una tienda para tabaco - le sonrio calido, sabia que el senpai no podia vivir sin cigarillos, era su anestesia o su relajante mas bien, y ahora necesitaba no un paquete, sino un carton completo...

Spoiler:

por Invitado Sáb Feb 12, 2011 6:22 pm

Nada mas escucharle contestar hizo su propios planes. No tendría que moderarse si no vivía con nadie -aunque fuera dudosa su conducta con chicas y ligues si tenía un pisito para él solo-, así que añadió otras tres latas a la cesta, con la que después le ayudó. Sacó la cartera, pagó todo lo que había cogido a lo largo de la tienda y salieron de nuevo al fresco de la noche. Era un lugar bastante bueno para vivir si tenía un Market cerca y una tienda de tabaco. Quizás, en el futuro, visitase a Morinaga mas veces...

Efectivamente, y tras caminar otro trecho de calles -donde dejó que el aprendiz cargase con las bolsas- llegaron a la tienda que mas interés tenía para el científico. Tras haberle contestado su primera pregunta, y mientras elegía dos cajetillas de su marca habitual y volvía a pagar, sus labios se movieron para formular otra pregunta.

-¿Y desde cuando eres independiente? ¿Te largaste de casa en el instituto como buen rebelde? -sonrió, abriendo una caja al retomar el camino, siguiendo al moreno hasta donde fuese que estaba su casa. Tomó uno de los cigarros en su boca para palpar los bolsillos en busca del mechero, fastidiado al no encontrarlo. Soltando un gruñido, resopló y volvió la vista al mas joven.

Ciertamente, en aquel tiempo, se había ganado algo de su confianza. Le había visto en una ocasión en una situación algo delicada, y por suerte tuvo mas paciencia que él al ayudarlo. Además había demostrado ser un chico la mar de atento y bastante volcado en los experimentos que le encomendaba, así como los propios que recientemente había empezado a hacer. Sin duda era el estudiante que mas había durado.

Pero todo ese momentáneo relax se venía abajo al recordar a su hermano. A la enfermedad de su hermano. ¡Al virus que seguramente le había contagiado ese capullo! Habían muchos de “ellos” caminando por ahí, y no quería tener problemas de nuevo con alguno.

-¡Venga, camina mas rápido, Morinaga! -apuró de repente, aún sin saber a donde se dirigía y sin prestar especial atención a su respuesta.

Spoiler:

por Invitado Dom Feb 13, 2011 12:16 pm

empalidecio un poco al oir esa pregunta, ya que vivir solo... como que hacia tiempo que vivia solo pero no era algo de lo que estaba orgulloso la verdad, pero por otro lado le hacia feliz que el senpai preguntase tanto por el.
Al ver que no encontraba el mechero, rebusco en sus bolsillos, seis meses eran suficientes como para conocer los habitos de alguien y el senpai siempre era recto, hacia todo cada dia igual, asi que se lo aprendio al dedillo, a excepcion de cuando al senpai se le ocurre pedirle un cafe o algo sin mas a cualquier hora, vamos como si tuviese un antojo que le pilla por sorpresa siempre.
Asi que saco de pronto un mechero de su bolsillo y se lo ofresio al senpai con una sonrisa suave.
- vayamos por aqui senpai - dijo señalando hacia otra calle, preferia no contestar a la pregunta de cuando vivia solo, no por ahora, pero si el senpai volvia a preguntar, tendria que responder.

por Invitado Miér Feb 16, 2011 7:51 pm

Si Morinaga le había contestado no tuvo constancia de ello. Caminaba por unas calles cada vez mas silenciosas, donde poco a poco se tropezaba con menos gente. Por un momento pensó, lejos del tema de su infectado por la homosexualidad y querido hermano, que su aprendiz no parecía el tipo de chico independiente. Por otra parte parecía siempre enfocado en los temas de laboratorio, cosa que en un principio le había extrañado. Recordaba que a su edad también tenía pasión por la química y la ciencia, pero los universitarios de aquel tiempo pensaban siempre en cosas mas productivas -según ellos- como las fiestas y las chicas. Hasta la fecha, Morinaga era el chico mas discreto y tranquilo que había conocido y con el cual había logrado “mantener una amistad”, por catalogarlo de alguna manera.

-¿Dónde demo-...? -giró el rostro hacia él para saber a dónde diablos se dirigían cuando vio, frente a sus narices, el mechero. Levantó una ceja- ¿Por qué llevas eso encima? -aún así lo cogió y encendió el cigarro- Da igual. ¿Vives por aquí? -siguió su indicación y continuó andando, dando una larga calada antes de devolverle el encendedor, mirando a su alrededor. No negaba que tenía ganas de llegar, calentarse un poco y comenzar a beber como si no hubiese mañana. Cuanto antes dejase de darle vueltas a todo antes podría dormir algo mas tranquilo.
Estaban en una calle alumbrada por farolas, dónde lo mas cercano que se veía era un bloque de edificios antiguos, seguramente restaurados, de dos plantas con escalera de metal.

“¿Es eso?” -se le pasó por la cabeza, ya que parecía algo asequible para un estudiante. Y mucho mas si vivía solo y no necesitaba espacio.

-Has tenido suerte encontrando un lugar tan cerca de la universidad -pareció alagar. De hecho, del centro allí habían llegado andando, e incluso dando un rodeo para comprar, y no se le había hecho demasiado largo. La pregunta de como lograba pagarse una vivienda pasó por su mente, pero no llegó a formularla. Tatsumi no era una persona que se interesase demasiado por la vida de los demás, y aunque considerase a Morinaga un “amigo”, quizás no era consciente de que sabía muy poco de él.

por Invitado Miér Feb 16, 2011 9:33 pm

- si, es un lugar muy tranquilo ademas - comento sonriendo mientras guardaba el mechero, sabia que el senpai jamas preguntaria o quisiera saber de donde lo optuvo o el por que lo tenia, y si hacia la pregunta no era por su curiosidad sino por extrañeza, y como que no era plan de decirle que era por el... asi que mejor ni contestar ya que asi no tenia que inventarse nada.
Asi que fue hasta el apartamento seguido por su superior, abrio la puerta y entro, se descalzo y fue hasta la cocina para dejar ahi las bolsas, ya que queria preparar un tentenpie para el senpai.
- pongase comodo, como si estuviese en su casa senpai - comento desde la cocina, saco del armario unas cosas para picar y tambien de la nevera, que era carne, preparo rapidamente unos pinchitos ya que no debian beber con el estomago vacio, era malisimo.
Sonriendo al ver que lo tenia todo listo, lo tomo y fue hasta el salon-dormitorio donde el senpai lo estaba esperando, era una verdadera maravilla el verlo ahi, donde el siempre estaba cuando no estaba en la universidad y ver ahi al senpai... aaahhh que maravilloso~~ no podia dar palabras a su felicidad, pero mejor no dejarse llevar mucho o lo pagaria caro ya que el senpai siempre lo veia raro cuando ponia caras al estar en su mente...
- a-aqui tiene senpai - puso la bandeja en la mesa - coma antes de beber o le sentara mal

por Invitado Vie Feb 18, 2011 7:12 pm

No dudó en mirar a su alrededor cuando entró, al fin, en el apartamento de Morinaga tras subir las ruidosas escaleras de metal. Era un bloque de tres o cuatro puertas por piso en bastante buen estado. Y desde luego, era una zona muy tranquila.
El mas joven tenía un hogar ordenado, pequeño y acogedor, donde no se sentía tanto el frío de fuera. Tatsumi se descalzó, dejando a un lado los tenis antes de entrar y toparse con el recibidor, que a su vez hacía de habitación. Una vez el otro desapareció soltó la maleta en el suelo, se quitó la chaqueta y se dejó caer sobre la cama, soltando un suspiro antes de quedar momentáneamente ausente. Quería reaccionar de manera madura al cambio sufrido por Tomoe, pero cuando se trataba de esos bestias pervertidos -refiriéndose claro a los homos, no a su hermano- no podía evitar exaltarse. No lo veía normal, era absolutamente deplorable, como una mala enfermedad que se extendía poco a poco por el mundo.

Se llevó una mano a la cabeza, desordenándose el flequillo antes de deslizarse por el borde de la cama y quedar en el suelo, apoyando la espalda en este. Tenía que pensar en algo rápido para convencer a Tomoe y que dejase de jugar a los gays...

-Ah, gracias -dijo, como acto reflejo, mirando los platos y luego la bolsa de cerveza. Ignorando, para variar, a Morinaga, cogió una lata, la abrió y dio un largo trago- ¡No necesito comer para ahogar mis frustraciones! ¡Empecemos! -aún después de decirlo, cuando se terminó a una velocidad increíble la primera lata, accedió a coger algo del plato para llevarse a la boca. Tomó un trozo de carne, que rápidamente desapareció tras sus labios, los cuales relamió antes de asomar la lengua y lamerse los dedos. Fue cuando alzó la vista hacia el otro.

-Creo que deberías hablar con mi hermano -dijo de pronto, con la segunda lata ya en la mano-. Puede que conociéndote vuelva al cauce y siente la cabeza -Morinaga no es que fuera un grandísimo ejemplo a seguir, ya que le resultaba muchas veces algo bobalicón. Sin embargo era un chico tranquilo y normal -según él-, y puede que lograse inculcarle lo mismo a Tomoe.

por Invitado Vie Feb 18, 2011 7:34 pm

empalidecio cuando senpai le dijo que hablase con su hermano menor, dios no! lo mataria! eso seguro y mas si se enteraba que un gay hablo con su adorable hermanito... aunque eso senpai no lo sabia claro... pero el no podia decirle que no fuese gay si el mismo lo era, asi que esa idea mejor descartarla.
- se-senpai no creo que hablando conmigo cambie de opinion o entre en razon jeje.... - rio nervioso ya que no sabia que era lo que senpai seria capaz de hacer si se enteraba, en el pasado habia hablado con kurokawa y no parecia la clase de persona que hiciese mal a alguien, todo lo contrario, parecia muy buena persona y amaba a tomoe, y... era la unica persona del circulo de senpai que conocia su secreto sobre su amor por el senpai...
suspiro y miro al pelilargo, que se tomaba la segunda cerveza y tenia en mano otro pinchito de carne, le alegraba verlo ahi y que le gustase la comida, esperaba que esa no fuese la ultima visita del senpai... aunque ahora mismo no sabia cuanto tiempo mas podria ocultar su secreto...

por Invitado Lun Feb 21, 2011 8:51 am

-¿Por qué lo dices? -levantó una ceja, logrando el moreno que le entrase curiosidad. Estaba de acuerdo, Morinaga no era la opción mas varonil del mundo -por su faceta de perrito faldero-, pero como hombre podría hablarle a su hermano de lo agradable que era estar con una mujer. Cuando eso le pasó por la mente, le miró, con sus característicos ojos malhumorados, aún no estando, de momento, enfadado- ¿Es que no has tenido novia nunca? Vamos, no me lo creo.

Dio un largo trago a la cerveza, alzando la rodilla para apoyar en ella el codo, bajando la cabeza y soltando un suelto suspiro, similar a un gemido, cuando recuperó el aire tras bajar la lata. Luego pareció bufar, no sabiendo ya en que punto comenzar a criticar a su cuñado. Alargando la mano, volvió a coger otro pedazo de carne.

-Lo mas normal es que se hubiese enamorado de una compañera de clase y la trajera a casa para hacer los deberes. La amistad hubiese prosperado y al graduarse se hubiera confesado, para mas tarde casarse y tener una familia común -se quedó embelesado mirando el fondo de la lata, mordiendo la carne con saña cuando toda aquella fantasía sobre el futuro de Tomoe se rompió en su mente al caerle una piedra con la palabra “homosexual” grabada en rojo- ¡Tsk! ¿Por que no puede ser así? ¡Todos hemos pasado por eso! -levantó de golpe la vista, mirando al menor- ¿¡No es así!? ¿Acaso tu no te enamoraste de alguien cuando ibas al instituto?

Con toda su tontería, empezaba a sonsacarle cosas al otro.

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