Complejidad [Priv]

por Invitado Mar Sep 21, 2010 2:59 pm

La iglesia del centro era como una especie de intermediaria entre la gran ciudad y el fragmento de bosque que comenzaba con el parque de Ueno. Rodeada por una plaza y situada a un lado de la rotonda, se imponía como una edificación sólida y elegante; como un remanso de paz en medio de la rutina estresante de Tokyo. Alone apuró el paso, caminando junto al recortado césped hasta pisar el camino de piedras que llevaba a la gran entrada, haciendo una reverencia a uno de los monaguillos que mantenía el orden y la limpieza en las flores de los alrededores. Cediéndole el paso al dragón, entraron dentro.

-Aquí es dónde me he estado quedando –le explicó-. Solo será un momento, ¿vale? –rodeó los bancos y caminó por un lateral, directo a una puerta con acabado en arco que había junto al altar, internándose así en las habitaciones de los sacerdotes y los que estaban actualmente en prácticas. La suya en particular era una de las últimas; estrecha y con poca iluminación. Tenía casi todas sus cosas metidas en las cajas que había sobre una cama deshecha y bastante pobre. Sobre la mesilla de noche se amontonaban un montón de periódicos viejos holandeses, que destacaban las últimas noticias sobre su gobierno y economía.

-Estoy pensando que cualquier idiota puede gobernar hoy en día, ¿no crees? –dijo, cogiéndolos todos y metiéndolos en la caja mas vacía que había, girándose luego hacia el dragón. Con aquella iluminación y sus ojos parcialmente abiertos parecía estarle lanzando una mirada entre cruel y amenazante- La gente que no tiene objetivos claros no es digna de gobernar nada, y mucho menos a gente que si tiene principios –hizo una pausa, inclinándose y sonriendo de nuevo-. Rechts? Espero que nos llevemos bien, Tetsuka. Tu si pareces un buen chico y seguro que te conviertes en alguien digno de confianza.

Le acarició la cabeza tras aquel paréntesis tan extraño. Era una parte de sus planes, aunque el niño quizás no los entendiese aún. No debía acelerar las cosas. Primero necesitaba ayuda y gente en la que poder apoyarse.

por **Tetsuka** Miér Sep 22, 2010 3:01 pm

Por lo que le contaba solo dio un pequeño suspiro, haciendo que sus orejas se agachasen un poco, aunque por la forma que estas tenían tampoco se notaba demasiado. La verdad es que había esperado que le dijiese algo como que le iba a gustar mucho su cuarto porque estaba lleno de cosas o algo así, pero bueno, no se podía hacer nada para cambiar eso. -¿Tenemos que ir a traer cosas? joo, no tengo ganas de hacer cosas...- dijo quejandose como lo haría cualquier crío, pero al escuchar que él mismo podía escoger los muebles de su cuarto sus ojos parecieron iluminarse por un momento, eso si que le parecía más divertido.

Ahora caminaba con más alegría que antes, escuchando lo que dijo sobre lo de que había leido cosas acerca de çel que hablaban sobre sus habilidades le miró curioso y a la vez extrañado, ¿hacían esas cosas en la tienda?la verdad es que nunca había charlado con alguien de por allí así que no tenía mucha idea de que se hacía dentro. -¿Mis habilidades? ¿por qué?- la manera en que le miró le hizo sentirse algo inseguro por un momento, pero al volver a sonreir como siempre no dudo en seguir andando algunos pasos tras él, viendo como llegaban a un edificio enorme que parecía ser una iglesia.

Se asombró por la estatura que tenía el edificio, quedandose completamente embobado y sin darse cuenta en que momento habían entrado exactamente al edificio hasta que el moreno habló. -Si...- miraba un poco como se alejó hasta una habitación, pero su miraba paseaba por el lugar todo el rato mientras caminaba también a ese cuarto, escuchando la pregunta tan curiosa que le hizo cuando hubo entrado. -¿eh?- no comprendía esa pregunta, él nunca se había interesado por la política, era aburrida y no creía que le aportase mucho. Su cuerpo se tensó un poco y un escalofrío recorrió su desnuda espalda por la manera en que ahora le miraba Alone, haciendose un poco hacia atrás cuando se agachó a su altura para sonreirle. -S-Si, yo también lo espero- dijo sin demasiada confianza, pues no sabía lo que esperar de un tipo que podía cambiar de una mirada completamente amable a una terrorífica en menos de un minuto.

El cuerpo le tembló de manera bastante sutil cuando puso la mano sobre su pelo, haciendo que cerrase los ojos para de nuevo abrirlos cuando vio que no pasaba nada. Sonrió por eso mirandole de nuevo de manera algo más feliz, pero aún sin fiarse demasiado; no sabía como romper ese incomodo silencio de ahora así que dijo lo primero que se le pasaba por la mente. -¡Peces! ...quiero poner peces en mi cuarto, ¿puedo hacerlo?- miró al mayor con ojitos para intentar ablandarle un poco y hacerle pensar en otra cosa para que no le mirase de nuevo de esa forma que le hizo asustarse.

por Invitado Vie Sep 24, 2010 4:49 pm

Estaba claro que el pet que tenía delante tenía una mente infantil y entusiasta; pero infantil al fin y al cabo. Sin embargo, eso no le hizo dudar de su elección. Era alguien perfecto, se portase como se portase, aunque igual no debía sacar temas tan serios como la política y los que no son aptos para ejercerla frente a él, ya que parecía no entenderlo en absoluto.

-No tendremos que cargar cosas, las elegiremos y nos las llevarán a casa -explicó- ¿Eso te parece mejor? Siento que esta noche tengas que compartir un futón conmigo, te prometo que para mañana tendrás una mullida cama sobre la que dormir.

Se levantó, obviando el tema de las habilidades físicas que tuviese. Después de todo ya tendría tiempo de comprobarlo. Girándose hacia sus cosas, las terminó de empaquetar, amontonando las dos cajas para poder cargarlas mejor al marcharse. El silencio se había hecho entre ellos, y aunque Alone no tendiera a incomodarse sabía que los de su alrededor no podían prolongarlo nunca mas de un minuto. Es cuando saltó el siguiente tema de conversación.

-Peces, ¿eh? Si quieres podré hacer algo al respecto. ¿Es que te gustan? -le preguntó de manera afable, revisando que no se le quedase nada. El cuarto estaba casi vacío, con la cama, los cuadros y dos grandes crucifijos colgados en la pared. No se los llevaría, desde luego. Hasta ahí podía llevar el concepto de “religioso”-. Piensa bien en todo lo que quieras para que lo compremos mañana...

Antes de que pudiese decir algo mas, los toques secos en la puerta le sacaron de su ensimismamiento. Un hombre entrado en años con una larga sotana pareció entrar en escena como un fantasma, ya que si no hubiese hecho ruido ni se hubiera dado cuenta de que estaba cerca del cuarto. Tras él, otro chico mas joven y rubio, que no parecía tan apesadumbrado. Mirando en derredor, el anciano se dirigió al otro sacerdote.

-Entonces te vas -dijo casi con pesar-. ¿No querrías seguir con nosotros? No hay edad para pertenecer a la casa de Dios. ¿No aspiras a estar a la par con él? -hablaba con la voz ronca, mientras exponía sus preocupaciones. Sin embargo Alone, que había escuchado el mismo sermón veces anteriores, se limitó a seguir sonriendo, como si le resbalasen mucho las palabras del Mayor.

-Het spijt me zo*, pero es mejor que viva ya por mi cuenta. Soy oficialmente un sacerdote, y si dejo la iglesia podré extender mucho mejor la palabra de Dios -se llevó la mano al pecho, muy solemne, antes de hacer una reverencia cortés-. Gracias por todo este tiempo invertido en mis enseñanzas.

-Es una pena verte partir -murmuró, dándose la vuelta y saliendo del cuarto- Una pena...

-Creo que cada día está mas senil -intervino el rubio, acercándose a ambos- ¿Te mudas lejos? Espero que mantengamos el contacto -dijo, malicioso- Y por cierto, ¿que es eso? -señaló a Tetsuka- ¿Es que quieres fomentar eso de que los curas somos unos pervertidos o que? -se rió, palmeandole la cabeza al dragón- Que niña mas mona~

-No te burles. Tetsuka es una mascota que me hará compañía a partir de ahora, ¿verdad? -miró al menor antes de girarse y coger las cajas, dispuesto a salir y dejar atrás aquel capitulo indispensable de su vida, que precedería al desarrollo de los demás.

Spoiler:

por **Tetsuka** Vie Sep 24, 2010 7:06 pm

Se puso un poco nervioso por las preguntas que le hacía, no sabía como responder a eso porque lo había dicho sin pensar y era lo primero que le vino a la cabeza, pero si le decía eso iba a quedar como un idiota, además, tampoco le desagradaban, era divertido intentar atraparlos y jugar con ellos. Después de pensarlo durante algunos segundos respondió con un suave movimiento de cabeza en manera afirmativa. -¡Si! lo pensaré bien, elegiré las cosas que más me gusten de la tienda ¿puedo hacerlo? oh, pero no me importa compartir la cama contigo- dijo por el comentario anterior sobre la cama; la verdad es que le daba igual mientras que pudiese dormir en un sitio comodo.

Miraba las cajas que había ya listas en el cuarto del mayor, tenía curiosidad por saber que había dentro y se dispuso a abrirlas acercandose un poco en silencio, pero en ese momento tocaron a la puerta, haciendole abandonar sus ideas de exploración por el lugar. Frunció un poco el ceño al ver aparecer a ese cura y a un chico rubio al cuarto, escuchando después la conversación que mantenían los más mayores con atención, le gustaba saber todo lo que pasaba a su alrededor.

-¿Casa de Dios?- repitió al escucharlo de manera bajita para que los demás que estaban allí no le escuchansen decir aquello; ¿se suponía que Alone era un cura o algo de eso? la verdad es que no lo había sospechado en ningún momento, aunque le pareció bastante extraño eso de ir a una iglesia a recoger cosas suyas. Deberían de haberle avisado de una cosa así, él no quería tener que ir a la iglesia todos los días a rezar o alguna cosa como esas, le parecía aburrido y no solo porque el moreno fuese una de esas personas que le gustaba tanto rezar tenía él que hacer lo mismo.

Se cruzó de brazos por lo que pasaba allí, el viejo estaba diciendo que se iba, pero porque se iba, si siempre había vivido allí, era extraño. Tal vez tendría que preguntarle más cosas conforme fuese pasando el tiempo, es más, en ese momento se disponía a preguntarle alguna cosa cuando el chico rubio que acompañaba al viejo se acercó a los dos, empezando a hablar de manera bastante confiada con Alone, tal vez se conocían de hace tiempo. O de algo más de solo tiempo por la manera en que le hablaba, era bastante chistoso, pero parecía como si intentase ponerle celoso, aunque no sentía ese sentimiento, aún no conocía a Alone lo suficiente.

Lo que si consiguió fue ofenderle por la manera tan despectiva en que se dirigía a él, haciendole fruncir el ceño con fuerza a la vez que daba un pequeño gruñido haciendo que se viesen sus colmillitos más de lo que normalmente se veían. -¡No me llames eso! ¡soy una persona, estúpido!- puede que fuese pequeño pero no idiota y mucho menos se iba a dejar pisotear por ese desconocido. Aunque al parecer el rubio se lo tomaba todo a broma y eso si que le cabreaba, además de que le llamase niña, cuando estaba más que claro que no lo era, además de por su ropa que enseñaba todo su pecho porque su cara no parecía la de una niña.

Afirmó con mucha sutileza, pues no le gustaba que le llamase mascota y menos delante de los demás, pero no podía decirle nada respecto a eso, al menos no cuando estuviesen con más gente. Eso era algo que ya tendría que decirle cuando estuviesen solos. Le siguió cuando cogía las cajas y salía de ese lugar, sacandole la lengua al rubio burlandose de él sin apartarse del lado de Alone, estaba deseando de llegar cuanto antes a su nueva casa.

por Invitado Dom Sep 26, 2010 7:52 am

Aquella reacción por parte del menor le había gustado. Al menos sabía defender sus principios y tenía la suficiente dignidad como para no dejarse pisotear. Eso era un buen factor que no desaprovecharía. Cargando las cajas, salió del cuarto junto a él, escuchando la risilla del rubio, que al parecer les siguió. De allí irían directos a casa, ya que faltaba muy poco para que anocheciese del todo. Al menos antes de ir a por el joven dragón había comprado algo para comer, aunque fuese preparado. Al ser una casa nueva no tenía los recursos como el gas o los ingredientes para hacer comida, por lo que debían conformarse al menos por esa noche con un aperitivo y un futón para los dos.

La iglesia apenas estaba llena. A excepción de cuatro personas en los bancos mas cercanos al altar, aquello podría considerarse muerto. Quizás por la hora que era o porque hoy día no había misa. Fuera como fuese, pudo pasar sin molestar a nadie, volviendo a la puerta, viendo como efectivamente el color fuego del cielo cambiaba a uno azul oscuro. Girándose una vez mas hacia su compañero, sonrió de manera encantadora; como solía hacerlo siempre.

-Bueno, pues nos marchamos -el otro chico tenía la vista puesta en Tetsuka, como pensando si molestarle de nuevo- ¿Puedes dejarlo ya? Solo es un niño -soltó una risita.

-Es que tiene todos los papeles para que me burle de él -el rubio, que a pesar de estar vestido con ropa sencilla de cura parecía algún vándalo de barrio, obvió el enfado de Tetsuka y se dirigió a Alone- ¿Sabes que elecciones están próximas? -otra vez aquella malicia.

Alone se limitó a curvar los labios hacia abajo.

-Lo sé. Hablaremos de ello en la reunión del domingo. Avisa a los demás -se giró, bajando los escalones que precedían a la puerta de la iglesia. El otro chico, sacando un paquete de tabaco de algún lugar de su ropa, se llevó un cigarrillo a los labios y lo prendió.

-Está empezando a confiarse demasiado. Además, tenemos un soplón. ¿Como deberíamos encarg-...?

-El Domingo -alzó la voz, lanzandole una mirada fría, antes de sonreír casi en amenaza- ¿Vale~?

El otro se limitó a parpadear, sonreír y alzar las manos, asintiendo. Fue cuando por fin Alone se puso en marcha, volviendo a traspasar el gran césped por el camino de piedras, dejando atrás la plazoleta que rodeaba la iglesia. Mirando al dragón, utilizó un tono de voz mas suave.

-Tetsuka, ¿tienes hambre? En casa he dejado platos preparados que he comprado en mi restaurante favorito, espero que al menos te guste algo -hizo señales a un taxi como pudo para pararlo-. Esa es otra cosa que tienes que pensar para comprar, la comida que te guste. Adelante, pasa~ -le invitó a entrar en el coche, dejando las cajas en el asiento trasero para luego meterse él, cerrando la puerta e indicarle al conductor a donde debían ir- No dudes en pedirme y preguntarme lo que quieras, ¿de acuerdo?- alzó la mano y le meció los cabellos. Se encargaría de que al menos el joven dragón tuviese su merecida diversión cuando salieran de compras. Quizás pudiese llevarle a algún lugar para que se explayase a gusto...

por **Tetsuka** Miér Sep 29, 2010 9:47 am

Escuchar la risa de aquel rubio detrás de ellos le ponía de los nervios, era un estúpido y un creído, se metía con él solo por ser más pequeño y eso no era para nada justo. Pero aunque lo hiciese no le importaba del todo, pues sabía defender e incluso era capaz de llegar a los puños si no le dejaba en paz; simplemente estaba intentando comportarse lo mejor posible delante de Alone para que no lo devolviese a la tienda, cualquier sitio era mejor que ese y más si podías vivir en una casa y tener tu propia cama.

Al salir de la iglesia su mirada fue derecha al cielo, pues este estaba bastante oscuro ya, lo que quería decir que no quedaba mucho para que fuese completamente de noche. Le encantaba mirar las estrellas al aire libre, pero también le asustaba estar solo en medio de la oscuridad, por lo que no se despegaba de su dueño en ningún momento, siquiera cuando se giró para ver al rubio el cual parecía tener muchas ganas aún de seguir molestandole. A cada momento que pasaba le caía peor, iba a decirle alguna cosa cuando pasó completamente de él, haciendole enojar más.

Por el momento lo dejaría pasar, pero la próxima vez que le viese no iba a ser la misma situación. Bajó los escalones junto al mayor, parando en seco al escuchar como levantaba su voz y la forma de sonreir que tenía. De nuevo aquella desagradable sensación que recorrió toda su espalda haciendole temblar, no le gustaba para nada esa faceta, aún le hacía estremecerse.

El chico rubio pareció coger la indirecta de que no quería saber nada sobre el tema, y atravesando el cesped le miró un poco a Alone cuando se dirigía de nuevo a él. -Si tengo hambre, pero no te preocupes, seguro que me gusta- le sonrió de manera agradable, intentando que de ese modo olvidase el asunto del domingo, fuese lo que fuese. Se metió en el taxi, moviendo un poco la cabeza cuando acariciba su pelo, afirmando ante la pregunta que le hacia. -Me gustan muchas comidas, no habrá ningún problema-

El taxi pronto se puso en marcha para llevarles donde Alone le había indicado justo cuando entraron. Ya tenía muchas ganas de ver su nuevo hogar, aunque no fuese lo mejor del mundo o tuviesen que dormir en un futón junto al mayor...¡Junto al mayor! al recordar eso sus mejillas enrojecieron un poco, sería la primera vez que durmiese con alguien de ese modo. No eran solo amigos, pues Alone le compró por algo, y no era un estúpido como para no saber de que se trataba, era por eso que empezó a ponerse un poco nervioso.

por Invitado Vie Oct 01, 2010 8:35 pm

Sígueme~~

[Cerrado]

por Contenido patrocinado

Complejidad [Priv]

Complejidad [Priv]

Re: Complejidad [Priv]

Re: Complejidad [Priv]

Re: Complejidad [Priv]

Re: Complejidad [Priv]

Re: Complejidad [Priv]

Re: Complejidad [Priv]

Re: Complejidad [Priv]